Las autoridades cubanas declararon este domingo en La Habana que la pandemia del coronavirus marcó la tasa de mortalidad infantil de la Isla durante 2021, año en que la enfermedad causó las mayores cifras de letalidad en el país.
El ministro de Salud Pública, José Ángel Portal, dijo que la tasa de mortalidad infantil de Cuba en 2021 sería de 7,5 por cada mil nacidos vivos, cifra en la que influyó el COVID-19.
Portal ofreció el dato al intervenir en la Comisión de salud y deporte de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en el octavo periodo ordinario de la novena legislatura en la capital cubana, informaron medios de prensa oficialistas.
Los datos preliminares expuestos por el gobierno, indican que, hasta el pasado lunes, 13 de diciembre, los niños nacidos en 2021 fueron 93 mil 733, lo que representa 5,747 menos en comparación con el año anterior. En total, fallecieron 690.
En 2020, Cuba registró una tasa de mortalidad infantil de 4,9 por cada mil nacidos, mejorando la cifra de 5.0 alcanzada en 2019, cuando, según dirigentes del MINSAP, hubo un incremento de fallecimientos asociados al nacimiento prematuro y el retardo en el crecimiento intrauterino.
Varias muertes de menores se reportaron en 2021 por coronavirus, las cuales trascendieron mientras el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) estuvo ofreciendo detalles de los pacientes fallecidos, algo que dejó de hacer de súbito en los peores momentos de la pandemia.
Otros problemas han sido reconocidos oficialmente como causa del incremento de cifras. En Ciego de Ávila, funcionarios de salud provinciales dijeron que el bajo peso de los recién nacidos en ese territorio, estaba influyendo en altos índices de mortalidad infantil.
Ciego de Ávila mostró en 2021 una tasa de 13,8 por cada 1,000 nacidos vivos -la más alta del país- que duplica la del año anterior, representando la muerte de 45 niños menores de un año.
Según autoridades sanitarias de la provincia, en las estadísticas “inciden el bajo peso al nacer y la prematuridad en la morbilidad y la mortalidad del territorio, asociados, fundamentalmente, a la hipertensión arterial, el crecimiento intrauterino retardado y el embarazo en la adolescencia”.
En cuanto a este último aspecto, cabe subrayar que algunas localidades reportan un aumento de adolescentes embarazadas ante la escasez de condones en el país.
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