Estados Unidos denunció este jueves la situación de los manifestantes cubanos del 11 de julio en Guantánamo, e instó al gobierno de La Habana a liberar inmediatamente a los presos políticos e iniciar un diálogo pacífico con la ciudadanía.
En un post en la plataforma Twitter, la embajada de EE.UU. en La Habana mencionó el caso del cubano Enrique Mustelier Sosa, juzgado este mes en la mencionada provincia por protestar contra el gobierno el pasado 11J.
Aseguró que el joven, así como otros nueve manifestantes de esa región del oriente de Cuba que han sido juzgados en las últimas semanas, podrían pasar ocho años tras las rejas.
“La comunidad internacional y los EE.UU. llamamos al gobierno de #Cuba a que libere inmediatamente a los presos políticos e inicie un diálogo pacífico”, señala el mensaje.
También en Guantánamo está siendo juzgado el activista cubano por los derechos humanos Yordis García Fournier, quien fue detenido el 11J, y ahora le piden una condena de cinco años de prisión por “ofender” al gobernante Miguel Díaz-Canel con la consigna "Díaz-Canel singao".
La sede diplomática ha estado publicando mensajes en los que menciona los nombres de los detenidos en Cuba por ejercer su derecho a la protesta, como parte de la campaña ¿Presos por qué?, impulsada por el gobierno de EE.UU., a fin de visibilizarlos ante la opinión pública internacional, que desconoce muchos de estos casos.
El lunes exigió al régimen cubano el cese de la feroz persecución contra los manifestantes pacíficos y se pronunció en favor de la liberación de dos hermanas de 22 años encarceladas en Placetas, Villa Clara.
“Fiscales en Cuba han fabricado cargos injustos hacia 16 manifestantes del 11J en Placetas. Las hermanas Lisdany y Lisdiani Rodríguez Isaac se enfrentan a penas de 10 años por manifestarse”, denunció un tuit.
Según el registro de la Organización no Gubernamental Justicia 11J, a causa de las protestas del 11 de julio al menos 1,315 personas están arbitrariamente presas en Cuba y de ellas 696 han esperado sus procesos judiciales en prisión, sufriendo incomunicación, aislamiento y otros castigos.
De las 571 personas que han sido excarceladas, muchas están en espera de juicio con la medida cautelar de libertad bajo fianza o prisión domiciliaria.
Hasta el momento un total de 140 personas enfrentan cargos de sedición y sanciones de hasta 30 años de privación de libertad.
Asimismo, durante la oleada de represión que siguió a las protestas antigubernamentales del 11J, más de 40 menores de edad fueron aprehendidos por las fuerzas del régimen. Apenas 29 fueron liberados y 15 de ellos aún permanecen detenidos.
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