La activista Ania Zamora, madre de Sissi Abascal, la integrante más joven del movimiento opositor Damas de Blanco, denunció este lunes en la emisora Radio Martí que su hija se encuentra "aislada" en un cubículo en la prisión de mujeres conocida como "La Belloté", en la provincia de Matanzas.
Zamora contó que la última vez que hablaron fue el jueves de la semana anterior y desde entonces no ha vuelto a tener noticias de ella. "Pasó el fin de año trancada, posiblemente sin alimentación, porque todos sabemos el problema con la alimentación que hay en la calle, imaginen ustedes en las prisiones”, aseguró.
Abascal, de 23 años, también miembro del Movimiento por la Democracia Pedro Luis Boitel, es una de las más de 1330 personas que fueron detenidas en Cuba por participar en las protestas antigubernamentales de julio de 2021, exigir un cambio de gobierno y libertad. Ella salió a manifestarse en Matanzas, el 11 de julio, pero no fue encarcelada hasta el 3 de noviembre, el día de su juicio, según los registros de Justicia 11J. Antes estuvo en reclusión domiciliaria.
En su juicio enfrentó los cargos de desórdenes públicos, atentado y desacato, por los cuales fue condenada a seis años de privación de libertad. El pasado 27 de diciembre, en el proceso de apelación se ratificó su sentencia.
"Son tantos y tantos presos del 11 de julio, y de antes del 11 de julio", dijo Zamora, quien consideró que es la fe lo mantiene a su familia con fuerza, la fe en que pronto todos serán liberados.
La madre resaltó que, a pesar de la situación en la que se encuentra su hija, en la llamada que sostuvieron ella incluso le dio fuerzas y le confirmó su valentía. “Recibí al principio su voz entrecortada, su dolor, pero a medida que fue hablando su valor salió y me dio hasta fuerzas a mí”, precisó.
“Me dijo: ‘mamá, no te preocupes, cuídate, cuida a mis hermanos, que tenemos que tener fe en Dios’. Ya ella pidió su ayuda religiosa para que el sacerdote la vaya a ver. (...) Quiero que el sacerdote de aquí, de la provincia de Matanzas, vaya y le lleve su ayuda”.
Hasta ahora, más de 700 personas continúan presas por motivos políticos, relacionados con el estallido social de 2021, pero desde antes, otras 150 se encontraban tras las rejas también por ejercer y defender derechos humanos.
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