Autoridades en la oriental provincia de Las Tunas adoptan el fomento de alimentos a base de soya, al no poder superar el déficit de leche que enfrenta la industria láctea de esa región desde hace varios meses.
Ante la falta de esa materia prima, en estos momentos esa industria prioriza la producción de yogurt y de otros derivados de ese cereal, como leches de distintos sabores a base de soya, según declaraciones al oficialista Periódico 26 del director técnico de la Empresa de Productos Lácteos en Las Tunas, Osmani Atencio Legrá.
Según el directivo, también el déficit de batidos a base de suero de leche y de pulpas se debe a la falta de componentes como la maicena y el azúcar.
Asimismo, detalló que el 90% de la leche que se acopia entre los ganaderos locales se destina a los niños de 0 a 6 años, embarazadas y las dietas médicas.
Atencio Legrá aseguró, además, que la leche que no esté apta para el consumo por su acidez, se emplea en la elaboración de quesos y que con el suero que se genera ese procesamiento se producen otros derivados como miragur, suero saborizado y requesón.
"Con respecto al helado estamos proponiendo que se nos acepte un plan de 300 mil galones, inferior al de la etapa anterior, pero que al menos garantice la presencia del producto, algo que siempre las familias agradecen", añadió el directivo al medio local.
En la última semana, las autoridades de esa provincia pidieron un esfuerzo a los ganaderos locales para suplir el déficit en las importaciones de leche en polvo que hay en todo el país, que impide cubrir las dietas médicas en este primer mes del año.
Desde diciembre, la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez alertó que en enero no se iba a poder garantizar ese alimento a las personas con problemas de salud graves o crónicos que lo requieran.
Díaz Velázquez aseguró a la emisora Radio Reloj que de todos los productos de la canasta básica, la leche en polvo es la que iba a tener más dificultad en las entregas, debido a la interrupción en los ciclos de aprovisionamiento a la red de bodegas y por la demora en el arribo al país del alimento importado.
Arael Martínez Teruel, director de la empresa de productos lácteos de Las Tunas, aseguró en una reunión con productores y distribuidores, reseñada por el citado medio local, que dada la imposibilidad de satisfacer la demanda, son los campesinos quienes deben asumir la responsabilidad y producir más leche.
Asimismo, en ese encuentro el gobernador de Las Tunas, Jaime Chiang Vega, acusó a los ganaderos locales de desviar la leche que producen hacia otros destinos más lucrativos, en detrimento de la industria y las unidades estatales de comercio.
Además, reprochó la actitud de los ganaderos, y recordó que hace dos meses se aumentaron los precios de compra y se mejoraron las tarifas para el acarreo y el enfriamiento.
Según Yoel Martínez Vargas, delegad de la Agricultura en Las Tunas, en el municipio cabecera de esa provincia hay unas 8,000 vacas en ordeño, las cuales promedian 3,8 litros de leche por día; es decir, 25,600 litros en cada jornada, pero a la industria solo llegan unos 9,000 litros.
Ante agravamiento de la escasez de alimentos en la isla, el gobierno cubano optó por continúa pidiendo un esfuerzo extra a la población.
En diciembre, Díaz-Canel pidió a los productores y vendedores de alimentos que renuncien a sus ganancias para bajar los precios y que la población pudiera acceder a los víveres para las fiestas de fin de año.
El mandatario llamó a "una discusión política con todos los productores y comercializadores, y convencerlos de la necesidad de en las circunstancias actuales, renunciar a un determinado nivel de rentabilidad o ganancia particular o colectiva, en función de bajar precios y que la población tenga precios más asequibles".
Según Díaz-Canel, la mayoría de productores y vendedores estarían de acuerdo en renunciar a su dinero, "porque son parte de este pueblo".
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