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Un encofrado en la fachada de una oficina de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, S.A. (ETECSA) en La Habana se erige como “solución” al problema de los reiterados carteles antigubernamentales en sus paredes.
Al parecer, las autoridades han recurrido a la creación de una superficie rugosa para dificultar los trazos del disenso, cada vez más presentes en Cuba.
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“Todo lo que provoca un simple cartel”, compartió en Twitter el perfil La Puntillita con una foto adjunta de las labores de albañilería en la mencionada oficina ubicada en la Villa Panamericana.
“En esta pared se han gastado más dinero que en toda la Villa Panamericana”, agregó el usuario en referencia al despliegue de recursos para ocultar un cartel de tres palabras, mientras la ciudad se deteriora.
El 11 de enero, la fachada amaneció luciendo el cartel “Díaz Canel Singao”, que simboliza el desprecio de los cubanos por el gobernante Miguel Díaz-Canel Bermúdez. Horas más tarde, las autoridades concentraron allí a un grupo de niños para realizar un acto de repudio al mensaje -ya cubierto por capas de pintura- y de desagravio a la figura del mandatario cubano.
También fue instalada una cámara, “desde el día uno, para vigilar a la pared”, ironizó una internauta. Sin embargo, el 16 de enero reaparecía y se imponía sobre la pared pintada el mismo epíteto a Díaz-Canel, inmediatamente sustituido por la consigna oficialista "Somos continuidad".
En ambas ocasiones oficiales del Ministerio de Interior y del Departamento de Seguridad del Estado se personaron de inmediato en el lugar en busca de indicios que los llevaran al autor de los letreros contestatarios.
Sobre las más recientes obras de construcción, los comentarios jocosos de algunos internautas no se hicieron esperar, sugiriendo que van a "azulejar" la pared y que todo forma parte de la “operación ‘descartelando’ la ciudad”. Otros apuntaron a la incapacidad del régimen para encontrar soluciones al descontento generalizado.
“¡Cualquier cosa les sirve menos producir o generar algo en beneficio de la alimentación de los cubanos! Ese gobierno es tan inepto que no usa el cerebro”, fue uno de los comentarios en redes sociales.
Todas las semanas trascienden noticias de una nueva pintada protesta en algún pedazo de concreto e, incluso, de pavimento, como resultado del incremento de acciones represivas del régimen y del empuje de la sociedad civil por sus derechos.
Recientemente, la esquina de Gervasio y Estrella en el municipio Centro Habana estuvo bloqueada por efectivos policiales tras descubrirse un "Patria y Vida" dibujado en rojo en el asfalto.
A finales de enero, otro cubano había grabado la frase “Abajo Canel singao” en un muro de Santos Suárez, en el municipio habanero de Diez de Octubre, y un nuevo acto político al trozo de mampostería se realizaba para intentar lavar la imagen del presidente.
Asimismo, a inicios de febrero alguien escribió "Abajo la dictadura" en el puente de la autopista Novia del Mediodía, en el municipio de La Lisa en La Habana, mientras en otros muros se cuentan las consignas en contra de las tiendas en MLC, de la dictadura, del hambre y por la liberación de los presos políticos.
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