La activista cubano-brasileña Zoe Martínez, joven que reside en Brasil y comenta la actualidad política en medios de comunicación de ese país, dio este lunes una lección a un periodista brasilero que se negó a reconocer que Cuba es una dictadura.
Invitado frecuente en el Programa Matutino de Joven Pan, el periodista brasileño César Calejon, se negó durante la emisión a reconocer que Cuba es una dictadura y recibió una lección de Martínez, según reflejó el portal carioca Jornal da Cidade.
“Cuba no tiene nada que exportar al mundo. La dictadura cubana acabó con Cuba. Mi familia se fue yendo poco a poco, primero mi padre, luego mi madre, luego mi hermana y yo… fue una separación familiar que duró 7 años, huyendo de esa dictadura”, le contestó la joven cubana al periodista que intentaba justificar la situación del país desde una óptica “izquierdista”.
Calejon se negó a decir que Cuba era una dictadura y Martínez, quien tuvo que emigrar de la isla, le recomendó que estudiara el tema antes de pretender justificar la situación de un país cuyo régimen ha traído sufrimiento y separación de familias.
"¡Ah Zoe, tienes 22 años y aún no has terminado de graduarte", dijo el periodista en un tono condescendiente con la joven cubana. “Puedes tratar de menospreciarme, pero mi conocimiento del tema es superior al tuyo”, le espetó la joven en plena tertulia.
Martínez, activista y comentarista política en medios de comunicación, se define a sí misma en sus redes sociales como una “joven cubano-brasileña luchando contra el comunismo, contra la corrupción y, siempre a favor de la libertad”.
“Que Cuba se tenga que abrir ahora a los extranjeros no quiere decir que sea una dictadura un poco menos rígida, sino porque se le acabaron los fondos de Brasil, de Venezuela… Después de la caída de la Unión Soviética tuvieron que crear el Foro de Sao Paolo porque el socialismo quedó destruido”, argumentó la joven frente a Calejon.
Además, Martínez le explicó que “Cuba tiene fama de ser un país que no paga sus préstamos. Tiene deuda con Brasil, tiene deuda con Argentina y con Venezuela”.
Recientemente el brasileño Gustavo Montezano, presidente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), dijo que aceptó puros cubanos como garantía del préstamo de mil millones de dólares para la construcción de la Zona de Desarrollo del Puerto de Mariel.
Días antes, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró que daba por perdido el dinero prestado a Cuba por los gobiernos de izquierda que antecedieron a su administración.
Si bien el mandatario reconoció que los préstamos bajo las administraciones de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y Dilma Rousseff (2011-2016) fueron legales, con apego a las leyes brasileñas, dijo que estos se hicieron "sin garantías", especialmente los destinados a Cuba y Venezuela.
"Ese dinero se debe ya contabilizar como perdido", dijo, al referirse al dinero enviado a Nicolás Maduro y al "dictador cubano", como llamó públicamente a Miguel Díaz-Canel.
“Mi colega de tertulia no supo responder a una simple pregunta: ¿CUBA ES UNA DICTADURA O NO?”, expresó este lunes la joven cubano-brasileña en Twitter. Su publicación acumuló más de cien respuestas y 23 mil reacciones.
“¿Allá hay elecciones libres y periódicas, libertad de asociación, pluralidad de partidos, libertad de prensa y libertad de ir y venir?”, preguntó con sorna un internauta brasileño. “Él sabe la respuesta con seguridad, simplemente no tuvo el coraje de decirlo porque caería su narrativa de izquierda”, dijo otro.
“No sabía o no quería. Todo vale, incluida la deshonestidad intelectual, para ensalzar un proyecto ideológico que en la práctica no funcionó por ningún lado”, consideró una tercera seguidora de la joven.
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