Dos mujeres cubanas fueron captadas por la cámara de un periodista mexicano que las interpeló cuando se disponían a cruzar el río Bravo hacia Estados Unidos.
“Ahí está, señores, unas personas más que cruzan hacia Estados Unidos”, señaló el periodista en el video. “Yo no soy autoridad para impedírselo... Quítese los zapatos que eso es muy peligroso”, les recomendó a las inmigrantes cubanas, quienes proceden de las provincias de Matanzas y Las Tunas.
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Luego de desearles que lleguen sin complicaciones, el reportero Carlos García narró la travesía de las cubanas, junto a migrantes nicaragüenses y de otras nacionalidades, en una transmisión directa para la página de Facebook “Lo que otros callan”, donde comparte videos con contenido similar para mantener informada a la población de la ciudad fronteriza de Piedras Negras.
“Como ven, se han tirado con ropa y eso es muy peligroso, porque la ropa es pesada. Esperemos que no haya víctimas. Hay muchas personas cruzando el río Bravo. Dios los bendiga”, describió el informador local, grabando la peligrosa escena.
Mientras capta las imágenes, les desea a los inmigrantes “que logren alcanzar lo que ellos buscan, llegar a Estados Unidos para tener una vida mejor. Van gritando de felicidad porque llevan el sueño de trabajar y ayudar a sus familias”.
Sin embargo, el video muestra a agentes de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. apostados en la margen contraria, observando a los inmigrantes que atraviesan el río cogidos de la mano y tambaleantes por la dificultad de afincar los pies en el lecho pedregoso y empujados por una fuerte corriente.
Avanzando hacia ellos, las inmigrantes cubanas y sus acompañantes llegan a la otra orilla. “Gracias a Dios nadie perdió la vida”, dijo el narrador. “El gobierno de Estados Unidos está ahí [los agentes], pero no les va a arrestar, ni pegar, ni robar sus pocas pertenencias”, comentó en un velado tono crítico con las autoridades de su país.
El grupo, compuesto por cinco personas, cruzó finalmente el río Bravo sin mayores contratiempos y se entregó a las autoridades para tramitar el asilo.
La entrada irregular de cubanos por la frontera sur de Estados Unidos marcó récord de 16,550 personas durante el pasado febrero, la mayor cantidad para un mes en más de dos décadas. El notable incremento de inmigrantes cubanos que intentan llegar por esta vía resulta indicador de la crisis migratoria que atraviesa la isla.
Las cifras, reveladas por el Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), establecen que, en apenas cinco meses del año fiscal 2022 (iniciado en octubre pasado), 46,752 inmigrantes cubanos han entrado en Estados Unidos por puntos fronterizos con México.
Además, según las estadísticas del CBP, 679 cubanos entraron desde octubre por otras zonas fronterizas de Estados Unidos, elevando a 47,431 la cantidad de registrados en el presente período fiscal. Durante la misma etapa, la Guardia Costera (USCG) y la Patrulla Fronteriza capturaron a más de mil cubanos que intentaron llegar a territorio estadounidense por vía marítima.
Si se tienen en cuenta los reportes diarios de cubanos detenidos en México y otros puntos de la llamada “ruta centroamericana”, la situación parece incontenible. Al mismo tiempo, son muchos los cubanos que intentan desde La Habana hacerse con visas y boletos aéreos que los lleven a Nicaragua, Costa Rica o Panamá con la intención de alcanzar la frontera sur de Estados Unidos.
La exención de visados para viajar a Nicaragua, establecida desde el pasado noviembre, catalizó la estampida de miles de cubanos que huyen del desabastecimiento, la escasez, la inflación y la represión contra los que reclaman cambios que empoderen a los ciudadanos con derechos y libertades que el régimen cubano niega.
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