El gobierno cubano comenzará en estos días la venta de módulos de cocina de inducción en las provincias orientales –Las Tunas, Holguín, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo– a un precio de 3,343 pesos.
El módulo incluye la cocina propiamente así como una cafetera, dos cacerolas y un sartén, que se comercializarán a través de los talleres del Programa de Ahorro Energético (PAE).
El precio de estos artículos es seis veces superior al que tenían antes, de algo más de 500 pesos, porque según dirigentes del sector de comercio, tras la aplicación de la Tarea Ordenamiento se incluyen los costos reales de producción.
Sin embargo, este producto tan necesario no se venderá a toda la población, sino solamente a quienes puedan entregar una cocina vieja que será sustituida por la nueva.
Aida González Bravo, directora de servicios personales, técnicos, comerciales y de uso doméstico del Ministerio del Comercio Interior (MINCIN), reveló al diario Granma que en un primer momento la venta es por la reposición de las cocinas cuya resistencia eléctrica está sin solución.
"Se vendieron hace algunos años como parte del programa del PAE, y en los talleres existe un control de ese registro de pendientes", precisó.
Según la dirigente, el cliente deberá acudir personalmente al taller y mostrar la libreta de abastecimiento y el carné de identidad, para evitar situaciones de acaparamiento, ilegalidades y ventas informales.
A quienes no pueda acudir por impedimentos físicos o de salud, se les habilitará el servicio de mensajería a domicilio.
"Otro mecanismo de control es que la venta es solo por reposición y el cliente deberá entregar la resistencia sin solución para recibir el módulo. Estas cocinas rotas que se entregan tienen partes y piezas que pueden ser recuperables y reaprovisionar los inventarios de los talleres", agregó.
González Bravo añadió que además de las personas reportadas en el registro de pendientes, serán priorizadas las familias en situación de vulnerabilidad, los casos sociales y los pobladores del Plan Turquino.
En marzo se anunció que se retomaría la comercialización de las cocinas de inducción y su menaje, luego que la empresa estatal Industria Electrónica Camilo Cienfuegos, ubicada en La Habana, reanudara el ensamblaje de esa línea.
El compromiso es entregar en un primer momento hasta 40,000 equipos, con una salida de 10,000 mensuales.
De mantenerse la producción de cocinas, su comercialización pudiera ampliarse al resto del país.
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