Miembros de la comunidad LGBTI y religiosos se enfrentaron el domingo en un parque de La Habana.
De acuerdo con el medio digital Tremenda Nota, algunos de sus reporteros intervinieron en un culto de la iglesia protestante que se celebraba en la zona de La Piragua, en el Vedado, porque según el reporte, los participantes estaban lanzando mensajes homofóbicos.
Lo más leído hoy:
"Ante un pronunciamiento homofóbico del predicador en el espacio público, los periodistas Maykel González Vivero y Manuel de la Cruz, junto a Osmel Padilla, miembro de la comunidad LGBTIQ+, confrontaron a los fundamentalistas", informó el portal.
Padilla transmitió en directo por su muro de Facebook momentos de la discusión con parte del grupo cristiano.
"Estamos aquí, aquí hay iglesias a las que les permiten tener fondos públicos hablando en contra de la comunidad LGBT, en un país de derechos", señaló.
En el video se ve a decenas de personas entonando una canción cuyo estribillo decía "hay poder en el nombre de Dios", mientras los activistas LGBT protestaban.
"Con sus políticas discriminatorias, quieren acabar con los derechos de la comunidad LGBT", gritó el joven, antes de empezar a corear "¡derechos sí, fundamentalismo no!".
Según relató Padilla, el predicador y un par de jóvenes se acercaron a él y a sus compañeros para pedirles disculpas por lo ocurrido, y reconocieron que no se habían expresado de la mejor manera.
"El predicador dijo que si hubiese sabido que nosotros estábamos allí no hubiese dicho eso... ¿Verdad condicionada? No lo dudo. Son innumerables los discursos de odio de muchas iglesias fundamentalistas en Cuba contra la comunidad LGBT, y más desde que está en discusión la aprobación de un nuevo Código de las Familias que defienda sus derechos", subrayó.
El reportero aclaró que en su directa, cuando habló de un "país de derechos" fue por la rabia que sentía en ese momento.
"Quienes me conocen personalmente saben mi postura política en cuanto al régimen dictatorial de la Isla y mi rechazo hacia la política totalitarista que nos impera. Todos saben que no hay derechos en Cuba para las minorías, ni la disidencia política, pero tenemos que luchar por ellos", recalcó.
Este enfrentamiento ocurre cuando el gobierno proyecta legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en un nuevo código de las familias, que debe someterse a un referendo en el segundo semestre del año, tras ser aprobado por la Asamblea Nacional en diciembre.
Tanto la Iglesia Católica como denominaciones cristianas protestantes en Cuba han manifestado su desacuerdo con la norma jurídica.
En marzo, una encuesta a la que tuvo acceso la agencia de prensa Reuters sugería que el nuevo código podría no ser aprobado en Cuba.
"Los referendos en Cuba suelen ser aprobados por abrumadoras mayorías, pero este puede enfrentar una batalla cuesta arriba a medida que se acerca la votación", dijeron expertos consultados.
La autorización al matrimonio homosexual no es el único punto polémico de la ley. El cambio del concepto patria potestad por el de responsabilidad parental hace temer a muchos cubanos que el Estado totalitario se inmiscuya aún más en el ámbito familiar, como ya hace en la educación, presa de un elevado adoctrinamiento ideológico desde preescolar.
Archivado en: