Roxana García Lorenzo, hermana del prisionero político Andy García Lorenzo, denunció arbitrariedades en el campamento de trabajo donde el joven manifestante del 11J está preso.
La activista explicó que un oficial del campamento se acercó en varias ocasiones a Andy para hablar mal de ella y esto causó altercados entre el preso político y su represor. En protesta, Andy se niega a trabajar la tierra y renunció a comunicarse por vía telefónica con su familia durante los próximos dos meses.
"Mi hermano y otros manifestantes están en campamentos de trabajo forzados. Están ahí injustamente, porque él debería estar libre. Sigue siendo víctima de a represión de la Seguridad del Estado", explicó Roxana.
Según narró, el oficial que reprime a su hermano y lo provoca lanzando ofensas contra ella, se negó a recibir unos cigarros que la familia llevó al preso al campamento. Tuvieron que comunicarse con los jefes superiores de la institución penitenciaria para pedir que Andy los recibiera.
Roxana denunció que la Seguridad del Estado ha llamado a todas las personas cercanas a la familia para interrogarlos y desacreditar a los García Lorenzo.
"Los han estado citando para hacerles interrogatorios, amenazarlos o tener 'conversatorios' sobre nuestra familia", dijo Roxana en su transmisión en directo. Explicó que ella y sus familiares no se van a rendir, seguirán luchando por la libertad de Andy y de los presos políticos en Cuba.
Explicó que en la actualidad Andy debería estar libre esperando el cierre de un proceso judicial, pero que tras ser excarcelado su hermano fue detenido arbitrariamente y hasta la actualidad no ha sido liberado.
"Aquí no se respetan las leyes. Todavía estamos esperando los papeles de la audiencia del tribunal provincial donde diga el cambio de medida para Andy. Ese papel (debió llegar hace más de un mes) no lo tenemos todavía. Él debería estar respondiendo en libertad hasta que llegara ese papel y está preso", comentó Roxana.
La activista considera que salir de la prisión no es suficiente para los manifestantes, porque aún en los campamentos de trabajo forzado están siendo reprimidos.
"¿Por qué tenemos que conformarnos con migajas? Ellos son inocentes, mi hermano es inocente, no tiene por qué seguir preso. Seguimos saliendo a las calles con miedo y temor de qué nos puede pasar.
El 25 de mayo Andy García fue excarcelado y volvió a su casa en Santa Clara. Los vecinos de su cuadra le dieron una calurosa bienvenida, pero pocos días después, tras realizar una transmisión en sus redes sociales el joven fue detenido y trasladado a un campamento de trabajo, donde se encuentra hasta la actualidad.
En abril de 2022 Andy fue condenado a 4 años de cárcel por los tribunales de Santa Clara (la fiscalía solicitaba 7 años de prisión) por manifestarse pacíficamente en las protestas del 11 de julio de 2021 en su ciudad. Posteriormente inició un proceso de apelación en el que denunció que las autoridades cubanas lo estaban juzgando por su manera de pensar.
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