Las llamas que desde este viernes devoran dos depósitos de combustible en la Base de Supertanqueros de Matanzas se incrementaron en las últimas horas y a la par se registran nuevas explosiones en la zona, aunque aún no se precisa si un tercer tanque ha sufrido afectaciones.
De acuerdo con el Sistema Informativo de la Televisión Cubana han cambiado las condiciones en el lugar del incendio, donde también se reporta un aumento en la cantidad de humo tóxico, aunque el color negro del mismo resulta relativamente favorable porque significa que ha disminuido la combustión en los dos depósitos que ya se encuentran siniestrados.
El periodista oficialista Abdiel Bermpudez Bermúdez resaltó que la estrategia continúa igual: tratar de contener las llamas e impedir que se extiendan hacia otros depósitos de combustibles. Para ellos bomberos, rescatistas y especialistas de CUPET laboran en el enfriamiento de los tanques dañados y en cubrir con áridos el paso entre estos envases y los grupos electrógenos que están instalados en la Base de Supertanqueros.
Para contribuir con esta indicación se sumaron pilotos de la Fuerza Aérea, específicamente una dotación proveniente de Villa Clara, quienes, a bordo de helicópteros y algunas avionetas, han estado arrojando agua de la bahía matancera sobre el fuego.
La prensa estatal apuntó que no se ha podido confirmar si existen afectaciones en el tercer tanque de combustible, que se encuentra justo al lado de los otros dos. Cada uno de estos depósitos tiene un diámetro aproximado de 100 metros. El primero en explotar tenía 26,000 metros cúbicos de crudo nacional, en tanto el segundo almacenaba combustible proveniente del extanjero.
La dirección del viento impulsa las llamas hacia el tercer y cuarto tanque, por lo que el peligro de que estallen resulta inminente. Mientras, continúa el trabajo de los rescatistas matanceros, a los que se están sumando especialistas e integrantes de la Cruz Roja provenientes de otras provincias.
Hasta el momento, el incendio ha provocado lesiones a 121 personas, nueve de las cuales fueron trasladadas al Hospital Universitario Clínico Quirúrgico General Calixto García. También se reportó el fallecimiento de un joven bombero, cuyo cuerpo fue recuperado en horas de la mañana pero no ha sido revelada su identidad.
Permanecen desaparecidos otros 17 bomberos que se encontraban en la zona intentando contener el fuego en el primer tanque cuando ocurrió la segunda explosión. Las autoridades ordenaron la evacuación inmediata de los vecinos y el uso de mascarillas sanitarias ante la expansión del humo tóxico que desprenden las llamas.
Alarmado por el potente siniestro el gobierno cubano solicitó ayuda a “países amigos” con experiencia en el manejo de este tipo de circunstancias. La administración de Joe Biden fue una de las primeras en responder y aseguró que “ley de Estados Unidos autoriza a las entidades y organizaciones estadounidenses a proporcionar ayuda y respuesta ante desastres en Cuba”.
También el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que enviaría especialistas del Grupo Petróleos de México (PEMEX) para auxiliar a los cubanos en las labores de extinción del fuego.
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