Al menos 20 viviendas quedaron afectadas por el derrame de combustible en la Base de Supertanqueros de Matanzas durante el incendio de grandes proporciones registrado en esa zona de la refinería.
El gobernador del territorio, Mario Sabines Lorenzo, dijo que se confirmó "la afectación a un asentamiento de 17 viviendas, y tres viviendas más dañadas por el derrame de combustible".
Afirmó, además, que las familias que allí vivían no podrán regresar a sus hogares por el momento.
El siniestro, desatado el pasado viernes luego de que un rayo impactara contra un tanque con miles de galones de crudo, obligó a la evacuación de al menos 4,946 personas.
Sabines confirmó la cifra de refugiados y agregó que muchos residentes en la zona del siniestro habían decidido salir de sus viviendas y autoevacuarse en casas de familiares y amigos.
La prensa oficial compartió en los últimos días fotos en las que puede apreciarse a los vecinos de la Base de Supertanqueros durmiendo en literas y recibiendo alimentos en los locales de acogida.
El incendio inició el viernes y luego de que un rayo impactará un tanque de crudo, pero se extendió desde el sábado a otros tres depósitos de combustible dejando 14 bomberos desaparecidos y dos muertos confirmados.
El miércoles el Cuerpo de Bomberos de Cuba informó que el incendio ya estaba controlado y sin riesgo de explosiones.
En conferencia de prensa el teniente coronel Alexander Ávalos Jorge, segundo jefe del Departamento Nacional de Extinción del Cuerpo de Bomberos, dijo que "ahora el enfoque principal está en lograr la total extinción del fuego, para lo cual hay fuerzas en la zona que trabajan organizadas en grupos".
La búsqueda de desaparecidos comenzará en 48 horas, informó el régimen cubano, que enfrenta severos cuestionamientos por enviar a la primera línea del desastre a jóvenes menores de 23 años y sin experiencia en incendios de semejante magnitud que cursaban el Servicio Militar Obligatorio.
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