Desde que Shakira y Gerard Piqué anunciaron su separación en junio, los dos no han dejado de ser noticia. Una presión mediática a la que ha dicho basta el futbolista español, que por primera vez desde que se hizo público el fin de su relación con la cantante ha roto el silencio para enviar un comunicado en el que amenaza con acciones legales.
A través de su bufete de abogados, el defensa del Barcelona anunció que emprenderá acciones legales tras sufrir "intromisiones que traspasan los límites de la legalidad".
"Estos reportajes e imágenes ocasionan no solo un daño a su honor y un perjuicio a su imagen, sino un grave atentado contra los derechos de sus hijos, cuya seguridad y protección representan para él su mayor preocupación", indican en el escrito.
En el comunicado hacen especial hincapié en los hijos, Milan y Sasha, de 9 y 7 años, respectivamente, fruto de la relación que mantuvo con Shakira.
"El seguimiento de algunos medios y paparazzi ha sido continuo, viéndose nuestro cliente obligado a alterar su rutina diaria con el único fin de proteger a sus hijos, a su familia y a su entorno más cercano", dicen.
El deportista busca proteger a su familia y para ello, "se ha visto en la obligación de solicitar medidas cautelares de alejamiento y emprender acciones legales". "El único objetivo de Gerard Piqué es garantizar su bienestar y restablecer sus derechos de intimidad, seguridad y tranquilidad", aseguran.
Tras hacer pública su separación, el futbolista se ha dejado ver en varias ocasiones con su nueva pareja, una joven llamada Clara Chía, con la que incluso fue a la boda de un amigo cercano. La cantante colombiana, por su parte, no ha hecho declaraciones al respecto, y en la mayoría de sus apariciones ha sido vista con sus dos hijos.
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