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El régimen cubano inauguró este lunes XII Festival Internacional Varadero Gourmet, una feria gastronómica que contrasta con la escasez de alimento que sufre el pueblo cubano.
La feria de comida gourmet busca potenciar principios de la cocina saludable, sostenible y la soberanía alimentaria a través de conferencias, exposiciones, jornadas de negocios y competencias, refiere el sitio oficialista Cubadebate.
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La apertura del evento, que se extenderá hasta el próximo 15 de septiembre en el Centro de Convenciones Plaza América de ese balneario, fue presidida por el primer ministro Manuel Marrero Cruz y otras autoridades del Partido Comunista y el gobierno, entre las que llamó la atención la ausencia del ministro de Turismo Juan Carlos García Granda.
Mientras los cubanos tienen que hacer largas colas para intentar acceder a productos básicos, esta nueva feria que impulsa el régimen, de acuerdo con Cubadebate, busca renovar las ofertas existentes en las instalaciones turísticas, promover el intercambio de experiencias entre los conocedores del sector y posicionar a Cuba como un destino de calidad en servicios de bares y cantinas.
En esta primera jornada de Varadero Gourmet, se realizará el lanzamiento de concursos de cata, cocina y coctelería, habrá recorridos por áreas expositivas y ocurrirán negociaciones con empresarios y especialistas vinculados a la comercialización, gestión y capacitación de bebidas y alimentos en los sectores estatal y privado.
La élite política cubana parece vivir en una realidad paralela a la que tiene que enfrentar diariamente los cubanos para intentar agenciarse los alimentos de una dieta básica.
El pasado abril, las imágenes de una suntuosa cena privada en el Hotel Nacional, luego de la clausura del Festival San Remo Music Awards en La Habana, causaron indignación en las redes sociales.
En las imágenes que se filtraron del banquete de clausura de este festival, organizado personalmente por la primera dama cubana Lis Cuesta Peraza, se pudieron observar largas mesas rebosadas de platos con carnes y verduras de primera calidad, elaborados postres; y a cocineros, con el logo del Hotel Nacional en sus uniformes, mientras preparan la comida o decoran los platos.
Las reacciones airadas de usuarios ante el lujo que contrasta con la escasez de alimentos que enfrentan los cubanos en el día a día, no se han hicieron esperar.
Mientras tanto, ante la escasez de alimentos y las pocas variables para sustituir ingredientes, la deprimida industria alimentaria nacional recurre a opciones viables en otros renglones alimenticios.
Hace unos días, trascendió que, en la Isla de la Juventud, la industria alimentaria prepara condiciones para elaborar alimentos que no dependan de la harina, como el casabe, y otros productos que sustituyan ese componente primario del pan.
La crisis nacional con la harina para la producción de pan, galletas y otros productos, negada públicamente por el gobierno cubano, se evidencia en las “alternativas” que hoy se impulsan desde todas las latitudes del país para cubrir la carencia de un alimento esencial en la mesa de los cubanos.
Pero la escasez no se limita a la harina, recientemente también se conoció que la empresa de productos lácteos en Santiago de Cuba, ante la falta de leche, emplea soya y harina de arroz en la fabricación de helado.
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