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La organización no gubernamental Human Right Watch (HRW) celebró que parejas del mismo sexo en Cuba puedan ejercer su derecho a casarse y expresó su deseo de que en futuro los cubanos puedan ejercer sus derechos a la libre expresión, asociación y elección de sus gobernantes.
“Me alegra mucho que el ‘sí’ gane en Cuba y que las parejas del mismo sexo puedan ejercer su derecho a casarse. Ojalá pronto los cubanos puedan ejercer su derecho al voto, ya no en un referendo sobre DDHH de las minorías, sino en elecciones presidenciales justas y libres”, dijo este lunes Juan Pappier, investigador sénior, de la División de las Américas de HRW.
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En un tuit, el activista por los derechos humanos compartió un mensaje del Consejo Electoral Nacional cubano (CEN) con los datos de participación y resultados del referendo del Código de las Familias celebrado este domingo en Cuba.
Con más de seis millones de cubanos que votaron, según los datos oficiales del régimen cubano, casi cuatro millones se decantaron por aprobar la nueva norma, mientras casi dos millones expresaron su rechazo al Código ya aprobado por unanimidad por la Asamblea Nacional del Poder Popular.
La participación, según el CEN, alcanzó el 74.01% del censo electoral. El Código, que requería una mayoría simple para quedar refrendado, fue aprobado por un 66.87% de los electores. Según el régimen, un 33.13% de los cubanos llamados a las urnas rechazó la nueva norma.
Según Pappier, la ganancia en derechos de una minoría no debe frenar el empuje de la sociedad civil cubana que reclama el respeto de los derechos humanos y una transición a la democracia en Cuba en la que, con presencia de observadores independientes, puedan celebrarse “elecciones presidenciales justas y libres”.
Cuando se cumplía un año de las históricas protestas del 11J en Cuba, el investigador aseguró que el régimen cubano estaba asustado y lo demostraba en cada ocasión que ocurrían protestas y cacerolazos en Cuba, como los ocurridos en Pinar del Río por los apagones.
"El 11J una protesta en San Antonio de los Baños prendió la mecha para protestas a nivel nacional. El régimen está asustado de que esto vuelva a ocurrir", escribió en Twitter el experto de HRW.
Entrevistado por CiberCuba en mayo de 2021, el abogado de HRW y experto en Cuba dentro de la prestigiosa ONG internacional propuso buscar una salida democrática para los cubanos sin caer en los errores de décadas de embargo comercial y de la política de deshielo del expresidente estadounidense Barack Obama.
Partidario de organizar "una presión inteligente" de Estados Unidos, Europa y la comunidad internacional hacia la Isla -que pase por la derogación del embargo-, Pappier no descartó que se puedan poner condiciones relacionadas con el respeto a los derechos humanos.
A la pregunta de qué opinión le merecían las detenciones arbitrarias que se estaban registrando en Cuba de manera creciente entre la sociedad civil, el experto aseguró que en Cuba artistas, periodistas independientes y activistas “sufren detenciones constantes, sistemáticas y reiteradas, que constituyen graves, gravísimas violaciones a los derechos humanos”.
“Estamos muy preocupados por esta situación y estamos encendiendo las alarmas en la comunidad internacional, tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea, para que haya una vigilancia y un escrutinio sobre lo que está haciendo el régimen cubano en contra de estos artistas”, aseguró.
Tres días antes del estallido social del 11J, Pappier pedía a la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michel Bachelet, que condenara al gobierno cubano.
"Bachelet, quien rara vez ha denunciado los abusos de derechos humanos en Cuba, debería condenar públicamente las violaciones sistemáticas en el país, antes de dejar su cargo a finales de agosto", subrayó el experto.
A comienzos de 2022, el abogado criticaba la falta de una condena internacional uniforme a la violación de derechos humanos en Cuba, lo que hacía que Miguel Díaz-Canel se saliera con la suya. "Creo que, gracias a esa respuesta disfuncional de la comunidad internacional, Díaz-Canel se está saliendo con la suya", aseveró.
"El gobierno cubano continúa reprimiendo y castigando prácticamente cualquier forma de disenso y crítica pública. A su vez, los cubanos siguen padeciendo una crisis económica severa que impacta en sus derechos sociales y económicos", dice el texto del informe, que enfatizó su análisis en la vulnerabilidad de derechos humanos tras las protestas del 11J.
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