El actor estadounidense Alec Baldwin llegó a un acuerdo con la familia de la directora de fotografía Halyna Hutchins, quien murió en un accidente en el set de rodaje de Rust en 2021.
Matthew Hutchins, viudo de Halyna, será el nuevo productor ejecutivo de la película y recibirá una parte de los beneficios.
"Hemos llegado a un acuerdo, sujeto a la aprobación del tribunal, para nuestro caso de muerte por negligencia contra los productores de Rust, incluidos Alec Baldwin y Rust Movie Productions, LLC. Como parte de ese acuerdo, nuestro caso será desestimado", dijo Hutchins en un comunicado al que tuvo acceso Deadline.
El viudo de la fotógrafa también informó que el rodaje se retomará en enero de 2023 y todos los actores del proyecto original formarán parte.
"No tengo ningún interés en entrar en recriminaciones o en atribuir culpas (a los productores o al señor Baldwin). Todos creemos que la muerte de Halyna fue un terrible accidente. Estoy agradecido de que los productores y la comunidad del espectáculo se hayan unido para rendir homenaje al último trabajo de Halyna".
Además de Baldwin y el resto de los actores, se espera que el director de la película, Joel Souza, quien también resultó herido a causa de los disparos en el set, regrese al rodaje.
"Nos complace que las partes se hayan reunido para resolver este asunto que, sujeto a la aprobación del tribunal, supone un importante paso adelante para celebrar la vida de Halyna y honrar su obra", dijo el abogado de Rust Movie Productions.
En octubre del año pasado, Alec Baldwin, actor y productor de la película Rust, mató por accidente a la directora de fotografía e hirió al director del filme, al disparar un arma de utilería que tenía balas reales mientras rodaban una de las escenas en Nuevo México.
En febrero, la familia de Hutchins presentó una demanda por homicidio involuntario contra el actor, los productores y otros miembros del equipo de la película. La demanda de la familia Hutchins afirmaba que los productores "hicieron recortes", "optaron por contratar el equipo más barato disponible" y "contrataron a sabiendas a una armadora totalmente no cualificada".
Durante su primera entrevista semanas después del trágico suceso, Baldwin se mostró profundamente afligido y confundido.
"Alguien puso munición real en esa pistola, una bala que ni siquiera debía estar en la propiedad", dijo Baldwin mientras lloraba desconsoladamente. "Yo nunca apuntaría a alguien con un arma y apretaría el gatillo".
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