Cuba recibió hasta septiembre un total de 1,074,814 de turistas, lo que representa el 42.99 % de la cifra planificada por el gobierno para este año.
La Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) publicó los datos correspondientes al noveno mes de 2022 y aunque destacó el incremento de turistas en un 594.7 %, en comparación con el año anterior, los datos no son positivos para el sector.
Hasta septiembre debían arribar a Cuba más de un millón 600 mil visitantes, sin embargo el plan se incumple y continúan sin adoptarse las medidas necesarias para revertir la situación, algo que ha alertado en varias oportunidades el economista Elías Amor.
Para el experto el éxito del turismo en Cuba depende de que el gobierno cambie la manera en que lo gestiona y se liberalice, dando más participación al sector privado, tal y como ocurre en otros países del área, como República Dominicana.
Si se utilizan como referencia datos de 2019, el último año con buenos resultados para el turismo en Cuba antes de que comenzara la pandemia del coronavirus, se observa que hasta septiembre habían llegado al país más de tres millones de visitantes. Los números del 2022 no representan ni la mitad de esa cifra.
Canadá, cubanos residentes en el extranjero y Estados Unidos siguen siendo los principales emisores de turistas a Cuba, con más de 600 mil visitantes. El resto provienen de Europa, Rusia, México y otros países, según la ONEI.
El gobierno continúa aferrado a la cifra de 2,5 millones de turistas antes de que finalice el año, y para ello ha desplegado una campaña de publicidad y propaganda a través de las turoperadoras con el fin de captar visitantes foráneos.
Turismo de salud, ecológico, cultural e histórico son algunas de las alternativas que promueve el gobierno cubano para captar clientes, que continúan viendo el país como un destino de sol y playa.
Otros números que demuestran la pésima gestión del sector turístico en Cuba por parte del gobierno es la tasa de ocupación hotelera, que hasta la mitad del año solo alcanzaba el 14 %, según datos oficiales.
"[Esto] dificulta la recuperación de inversiones turísticas", resaltó el economista cubano Pedro Monreal en un post de Facebook, en referencia al incremento de las inversiones estatales en el sector hotelero, incluso cuando el país atravesaba la crisis del COVID-19.
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