Más de 106 mil viviendas continúan afectadas en Pinar del Río tras paso del huracán Ian, según fuentes gubernamentales.
La cifra ha disminuido a 106,299 viviendas afectadas total o parcialmente, informó la presidenta del Consejo de Defensa Provincial, Yamilé Ramos Cordero, en reunión encabezada por el gobernante Miguel Díaz-Canel, para dar seguimiento a esos asuntos.
En el plazo de una semana se han intervenido en 818 viviendas. Desde el paso del meteoro a finales de septiembre, que dejó daños catastróficos en la provincia, se han recuperado 7,119 viviendas en la provincia.
Sin embargo, el total de inmuebles dañados sigue abierto mientras las autoridades continúan certificando las afectaciones. Según Cubadebate, se trabaja fundamentalmente en la solución de los daños parciales en los techos.
René Mesa Villafaña, ministro de la Construcción, afirmó que “la entrada de recursos continúa siendo estable y se sigue potenciando la producción local de materiales”. Más de 236,000 tejas de asbesto cemento y más de 90,000 de zinc se han distribuido a los puntos de venta de Pinar del Río, indicó.
En contraste con el cuadro pintado por el ministro, la pasada semana autoridades de la provincia intentaron desalojar a una embarazada damnificada del huracán Ian, que había buscado refugio en una instalación del ministerio de la Construcción en San Juan y Martínez, tras perder su vivienda.
“Otro de los abusos del sistema, sin ayuda de ningún tipo tratan de desalojar a una embarazadas de 19 años en Pinar del Río”, denunció en Facebook el activista Yerandy Valdés Ruiz, tras compartir un video en el que muestra las condiciones en la que está viviendo la joven futura madre, con unas pocas pertenencias en el cascarón vacío de la instalación.
Por otra parte, unas 26 familias damnificadas serán compensadas con viviendas construidas a partir de paneles prefabricados de madera y techos de zinc. Según la Agencia Cubana de Noticias, las estructuras se componen de portal, sala, dos cuartos, comedor, cocina y baño; este último de bloques y cubierta de cemento.
La calidad de estas casas contrasta con la veintena de viviendas que se levantan en la comunidad José Martí, del municipio San Luis, que también son de madera y techo de zinc.
Además del sensible tema de la vivienda, a casi dos meses del paso del siniestro se ha recuperado el servicio eléctrico al 95.37% de los clientes. Según Ramos Cordero, con excepción de San Juan y Martínez y San Luis, que se encuentran a un 73.09% y un 73.52%, respectivamente, en el resto de los municipios se ha recuperado más del 96% de las afectaciones.
A pesar de las promesas oficialistas, las autoridades han debido admitir que miles de familias pinareñas llevan más de dos décadas esperando por la recuperación de sus viviendas tras el paso de fenómenos meteorológicos.
Tras el paso de Ian el gobernante Miguel Díaz-Canel pidió al pueblo tener confianza, cuando 6,347 familias damnificadas de ciclones anteriores aguardan por casas desde hace más de 20 años, según cifras oficiales.
Los planes gubernamentales establecen dos vías para construir viviendas, la estatal y la privada, llamadas eufemísticamente "por esfuerzo propio"; pero en ambos casos el retraso es considerable, con solo un 10% ejecutado de las casas previstas.
Entre 2002 y 2008, Pinar del Río perdió 10,800 casas por el embate de ciclones y, hace cuatro años, el gobierno cubano lanzó un plan de construcción de viviendas que contemplaba la solución a la crisis con la edificación de hasta 12,000 en el cuatrienio; pero la crisis permanente de Cuba ha impedido el cumplimiento de las previsiones oficiales.
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