La activista por los Derechos Humanos, Camila Rodríguez, miembro de la organización no gubernamental Justicia 11J, abandonó Cuba bajo presión de la Seguridad del Estado.
En un mensaje publicado en Twitter Camila informó su salida del país y su voluntad de continuar la lucha por la liberación de los presos políticos.
"Yo pisaré esas calles nuevamente, como nuevamente estoy en redes pidiendo Libertad para los presos políticos. Salí de Cuba convenida de que no hay otro camino que el de cumplir la responsabilidad de devolver a su hogar a todos aquellos que fueron detenidos", dijo la joven cubana.
Explicó que "durante los ocho meses desde que comenzó la represión y el hostigamiento sostenidos, Justicia 11J no dejó de denunciar y de ser consecuente con sus propios compromisos".
Durante todo este tiempo ella y sus colegas de la organización Justicia 11J acompañaron y guiaron a las familias de los presos políticos e indicó que en el futuro continuarán haciéndolo.
Por su parte la organización señaló que el caso de Camila no es único. Semanas atrás también salieron al exilio tres de sus activistas fundadoras, tras sufrir "persecución en relación con sus labores como periodistas y activistas".
Desde inicios de año Camila Rodríguez había denunciado el acoso de la policía política. La activista cubana dijo que la Seguridad del Estado la presionaba a ella y a su familia con llamadas desde números desconocidos, mantenían operativos frente a su vivienda e, incluso, la sometieron a varios interrogatorios.
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