El director de Asuntos Consulares del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Ernesto Soberón, se mostró insatisfecho con las medidas del presidente Joe Biden para frenar la entrada de inmigrantes irregulares en Estados Unidos.
Soberón ofreció declaraciones a la prensa oficialista sobre las políticas aprobadas por Biden este jueves que implican, entre otras cosas, la devolución inmediata de quienes intenten entrar de modo ilegal a Estados Unidos.
Soberón dijo que el Estado cubano alertó durante años al gobierno de Estados Unidos "sobre los riesgos del estímulo a la emigración irregular", en referencia a la vigencia de la Ley de Ajuste Cubano, y aseguró que esa legislación da "un trato privilegiado" a los migrantes de la isla, insinuando que debe ser derogada.
El director comentó que el gobierno cubano ha mantenido una "posición consistente a favor de la migración regular" y que para ello han firmado acuerdos bilaterales desde 1980. Señaló que Cuba los ha cumplido y que Estados Unidos no.
"El incumplimiento injustificado desde 2017 del compromiso de otorgar un mínimo de 20 mil visas anuales y el cierre también injustificado del procesamiento de visas en la Embajada de Estados Unidos en Cuba, que se corrigió recientemente, han provocado una acumulación y crecimiento significativo del potencial migratorio, que no solo afecta a nuestros dos países, sino también a los países de tránsito", dijo Soberón.
En sus declaraciones no se refirió a la crisis económica en Cuba, la inflación, el auge de la pobreza, ni a la pérdida de libertades y mucho menos a la represión del Estado contra quienes piensan diferente. Sin embargo, reiteró el discurso del embargo como "una de las causas fundamentales de la emigración".
En criterio del funcionario, "una relación migratoria más normal, que incluya visitas temporales entre los dos países, contribuiría a disminuir el potencial migratorio y los intentos de entrar a Estados Unidos por vías y con prácticas irregulares".
Al referirse a la política migratoria en Cuba no dijo que vayan a producirse cambios. En su criterio el Estado "facilita el viaje de sus nacionales hacia el exterior y el regreso a Cuba, de manera regular, ordenada y segura".
Soberón enfatizó que esto puede constatarse si se observa "el incremento sostenido de los viajes, en un sentido u otro, previo y posterior a la Pandemia".
El funcionario no se refirió al impacto que esta crisis migratoria tiene en el panorama demográfico de un país cada vez más envejecido y que se va quedando sin fuerzas productivas. Solo en el año fiscal 2022 más de 220 mil cubanos cruzaron la frontera de Estados Unidos por tierra y otros 6 mil llegaron por mar.
Paradójicamente, en 2022 el gobierno de Estados Unidos entregó más de las 20 mil visas acordadas para inmigrantes cubanos, por ser un objetivo prioritario de la administración Biden en su política hacia Cuba, pero eso no frenó la ola migratoria.
Este jueves Biden anunció que las fronteras estadounidenses quedan cerradas a los migrantes cubanos. Alertó que cruzar ilegalmente desde México implicará una expulsión inmediata y una penalización por cinco años a fin de impedir que quienes incumplan la ley puedan iniciar un proceso migratorio.
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