La Embajada de Estados Unidos en La Habana aclaró este miércoles que las solicitudes para el Programa de Parole Familiar Cubano (CP3) se encuentran suspendidas indefinidamente en el contexto de las nuevas alternativas migratorias abiertas por la administración de Joe Biden.
"Este programa –que era muy similar al Programa Cubano de Reunificación Familiar (CFRP)– fue suspendido indefinidamente en 2017. Pero puede que existan otras alternativas de inmigración", señaló un funcionario de la sede diplomática en su cuenta oficial en Instagram.
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El oficial de la legación estadounidense exhortó a los interesados en emigrar a ese país revisar las nuevas vías en la página web del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS).
La aclaración está dirigida al programa CP3, pues las solicitudes del otro programa, CFRP, están ya en proceso o tienen citas para entrevista desde septiembre del pasado año.
Dentro del Programa Cubano de Parole, los solicitantes de visa de inmigrante (CP1) podían, al momento de su entrevista consular, solicitar un parole para otro miembro de la familia (CP3). Ahora estos podrán optar por el parole humanitario a través de un patrocinador en EE.UU.
En septiembre de 2022 esa oficina anunció que reanudaría las operaciones del CFRP, con entrevistas en su embajada en La Habana a los casos que estaban pendientes desde que cerró la sede en 2017. En noviembre de 2017 se informó que "el procesamiento de las solicitudes dentro del CFRP/CP3" había sido "DETENIDO".
Los beneficiados con el programa de parole CFRP pueden ingresar a territorio estadounidense sin tener que esperar a que sus casos de visa de inmigrante estuviesen resueltos, una espera que se agravó desde 2017 con el cierre de la embajada a raíz del llamado "Síndrome de La Habana".
Una vez en Estados Unidos, los beneficiarios del programa CFRP pueden solicitar autorización para trabajar mientras esperaban poder ajustar su estatus como residentes legales permanentes.
El pasado 5 de enero el presidente Joe Biden anunció que otorgaría 30,000 paroles humanitarios mensuales a cubanos, nicaragüenses, haitianos y venezolanos, a fin de detener la llegada masiva de indocumentados a sus fronteras.
Al parecer este mecanismo ha funcionado eficientemente, ya que los primeros beneficiados con la asignación del parole comenzaron a viajar una semana después a Estados Unidos.
Sin embargo, las familias que llevan más de cinco años esperando por la resolución de sus solicitudes de visas de inmigrantes por reunificación familiar ante USCIS, cuestionaron que el programa de parole humanitario implantado por Biden funcione con más rapidez.
En 2022 la Embajada de La Habana comenzó a procesar las entrevistas en la isla, pero el atraso continúa afectando a las familias que llevan años esperando reencontrarse en Estados Unidos.
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