Al menos ocho personas murieron y otras dos resultaron heridas durante un tiroteo a la entrada de una sinagoga en Jerusalén, apenas un día después de una incursión israelí en un campo de refugiados de Yenín, Cisjordania, donde fallecieron nueve personas entre militares y civiles.
La policía israelí calificó el incidente de "atentado terrorista" y agregó que el presunto atacante fue "neutralizado".
El hecho ocurrió en el barrio de Neve Yaakov hacia las 20:15 hora local (18:15 GMT); y dejó 10 víctimas en total, algunas de ellas gravemente heridas, dijeron las autoridades.
Según los reportes de medios de comunicación locales el sospechoso fue abatido por las fuerzas de seguridad cuando huía del lugar de los hechos, donde había un fuerte despliegue de paramédicos y efectivos de seguridad.
Se presume que el ataque –que alcanzó a quienes se encontraban en la entrada de la sinagoga– sea una respuesta a la redada israelí del jueves en el campo de refugiados de Yenín, que dejó nueve muertos en Cisjordania ocupada.
Este hecho fue respondido con el lanzamiento de cohetes contra Israel desde Gaza, a lo que el gobierno israelí respondió con nuevos ataques aéreos.
Tras conocer el atentado de este viernes Estados Unidos condenó la acción y dijo a través de un portavoz "nos solidarizamos con el pueblo israelí".
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