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Alida J. Peraza Valdivia, suegra del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, se mudó a Miramar, donde residirá en casa de su hijo, confirmó CiberCuba con vecinos de la calle 30 y un oficial del Departamento Nacional de Identidad (DNI) , que facilitaron datos y fotos del despliegue logístico para la mudanza; con medios estatales y descarga de abundante comida y bebidas.
"Entendemos que la compañera venga a vivir con su hijo, pero lo que nadie se explica es que la mudada se haya hecho con camiones estatales y luego hayan descargado cajas con comida y bebidas; en medio de la compleja situación que estamos atravesando", apuntó una vecina del nuevo lugar de residencia de la suegra del mandatario.
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La mamá de Lis Cuesta Peraza residirá en un apartamento, sito en 30 # 308 e/ Av. 3a. y 5a. Avenida. Miramar, La Habana; vivienda habitual de su hijo médico, David, especialista en Anestesiología, que reside allí desde hace más de un año, confirmó un oficial del Departamento Nacional de Identidad (DNI), de La Habana, que exigió el anonimato.
Antes de mudarse a Miramar, la suegra de Díaz-Canel residía en una casa, en la calle 25 e/ 4ª y 6ª, en el Reparto Lenin, de Holguín, precisó la fuente del DNI.
CiberCuba no ha podido establecer la fecha exacta ni los motivos de la mudada desde Holguín a Miramar de David Cuesta Peraza, pero los vecinos colindantes aseguran que fue estando ya Díaz-Canel al frente del partido comunista y el gobierno cubano.
El Ministerio de Salud Pública y otros organismos de la administración central del gobierno cubano solían disponer de una reserva de casas y apartamentos para dirigentes y/o especialistas de alto nivel que se trasladaban a La Habana por motivos laborales y/o profesionales; propiedades que eran medios básicos del estado.
Pero Raúl Castro redujo al mínimo dicha reserva y optó por la fórmula de asignación de inmuebles y su correspondiente inscripción en el Registro de la Propiedad; incluidas mansiones de Siboney que pasaron de ser propiedad de Palco Inmobiliaria a titulares privados, como el primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
A diferencia de Estados Unidos, España o México; Cuba carece de una residencia oficial para mandatarios en el ejercicio de su cargo y, en el caso de Díaz-Canel y Lis Cuesta Peraza optaron por reproducir una especie de Punto Cero en la Avenida 25, en las proximidades del Palacio de Convenciones; uniendo varias casas de lujo; incluida una antigua residencia destinada a embajadores extranjeros.
(Nuestro colaborador Luis Domínguez contribuyó a esta información).
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