El gobierno cubano reconoció que existe atrasos en la venta racionada de los alimentos que conforman la canasta básica, por eso en febrero no todos los consumidores pudieron adquirirlos.
Compota para niños, café, frijol, chícharo, arroz, aceite azúcar y pollo, son los alimentos con mayores atrasos de venta, explicó Francisco Silva Herrera, director general de Venta de Mercancías, del Ministerio del Comercio Interior (MINCIN).
Durante marzo venderán a la población la cuota de pollo correspondiente a febrero, y el funcionario del MINCIN explicó al periódico oficialista Granma que ese producto ya se encuentra en el país, listo para ser distribuido.
La misma situación ocurrirá con el café, que se mezcla con chícharo y depende fundamentalmente de la producción nacional, que se sostiene con empresas estatales que generan importantes pérdidas económicas.
Silva Herrera aseveró que la producción de compota para niños tiene un atraso de varios meses y en marzo será que culminará la elaboración del alimento, y posteriormente comenzarán a distribuirlo en las bodegas.
"Los granos (frijol, chícharo y arroz) ya están en el país, y en estos momentos empresas mayoristas completan las cantidades pendientes de distribuciones hasta el mes de febrero", acotó.
El azúcar es otro problema por resolver para el MINCIN, y Silva Herrera adelantó que no estará disponible en su totalidad en la mayoría de los establecimientos comerciales, por tanto se venderá a lo largo del resto del mes.
Con el aceite, el funcionario cubano, reconoció que hay atrasos en la cuota y en los próximos días se estima que finalice la distribución del producto pendiente desde febrero y que se vende en el mercado informal a más de mil pesos el litro.
Durante marzo, las autoridades se comprometieron a garantizar la cuota de siete libras de arroz, aunque no será homogénea en todo el país, ya que varios territorios recibirán el producto de forma parcial, agudizando la crisis que existe con este producto en toda Cuba, donde la libra puede alcanzar hasta en 250 pesos en el mercado informal.
El gobierno cubano culpó de esta crisis alimentaria al incremento de los precios de productos y materias primas en el mercado internacional, que superan los planes de contratación previstos para esta etapa.
También se responsabilizó al costo de los fletes, que provocaron atrasos en el arribo de embarcaciones a puertos cubanos y, por supuesto, el embargo estadounidense, que genera "limitaciones financieras", según la versión oficial.
Cuba atraviesa una crisis similar a la que hubo en los años 90 del pasado siglo, cuando el gobierno decretó un "período especial en tiempos de paz", y donde adquirir cualquier alimento o producto de primera necesidad era sumamente difícil.
Muchos cubanos denuncian que en estos momentos el déficit es generalizado y ni teniendo dinero en moneda libremente convertible (MLC) puedes adquirir comida, aseo o medicinas.
El mercado informal es el principal suministrador de la población y allí es donde pueden comprar lo que necesitan, a precios elevados, impulsados por la inflación y el descontrol.
Cuba cerro el 2022 con una inflación casi del 40 %, una de las más altas de la región, aunque expertos en economía consideran que este dato puede ser superior, ya que la Oficina Nacional de Estadísticas e Información solo analiza los precios de los productos y servicios que ofrecen entidades estatales.
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