Un total de 1,945 enfermos de cáncer fallecieron en Santiago de Cuba durante 2022, según cifras oficiales.
Esta cifra supone, sin embargo, 146 decesos menos que en 2021, en especial entre pacientes de 30 a 69 años, informó Letys González, coordinadora del programa de control de estas enfermedades en esa provincia oriental, en declaraciones recogidas por la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
Esta disminución, asegura la funcionaria, se debe a la reducción de la mortalidad prematura por cáncer de pulmón, el monitoreo constante a nivel hospitalario y otras acciones que desarrollan para garantizar la calidad de vida de los pacientes.
El cáncer de próstata encabeza la mortalidad por cáncer en Santiago de Cuba, con 371 pérdidas, seguido del cáncer de mama, intestinal y de estómago, por lo que González insiste en la importancia del chequeo periódico para la pronta detección.
La funcionaria reconoció que, pese al descenso de muertes, aumenta cada año el número de diagnósticos, por lo que llamó a la articulación con los servicios de atención primaria de salud en el enfrentamiento a estas patologías.
Asimismo, aseguró que el sistema de salud pública en la provincia procura minimizar los índices de mortalidad e incidencia mediante la detección temprana y promoción de estilos de vida saludables desde las escuelas.
El cáncer se consolida como la tercera causa de muerte en Cuba, donde esa enfermedad cobró la vida de casi 27 mil pacientes en 2021, según las últimas cifras disponibles.
Ante esa realidad, el científico Agustín Lage consideró el gobierno cubano tiene que atender la elevada mortalidad en cáncer con "el mismo sentido de urgencia que le dimos a la COVID-19".
Unos días atrás, Cuba anunció varias acciones encaminadas a atajar esta problemática, como la elaboración de la vacuna CIMAax-EGF para tratar el cáncer de pulmón, que se encuentra en fase de ensayo clínico en el Hospital Hermanos Ameijeiras.
En provincia como Las Tunas y Sancti Spíritus son diagnosticados más de 2.000 pacientes de cáncer cada año, y más de 900 murieron el pasado año en Holguín.
En Cuba, la crisis del sistema de salud afecta muchas veces a los pacientes enfermos de cáncer, que no pueden acceder a los sueros y medicamentos que necesitan, o no pueden tener a la calidad de vida o los cuidados paliativos que precisan en las etapas finales de esta enfermedad.
En septiembre, Niurvis Leibis Vázquez Matos, una cubana enferma de cáncer rectal, lanzó un pedido de ayuda en las redes sociales para la instalación de un baño en su domicilio.
A inicios de agosto se conoció, por su parte, que la producción de citostáticos para tratar diferentes tipos de cáncer y otros padecimientos invasivos se mantendrá inestable en Cuba ante la falta de materia prima e insumos.
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