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En medio de la escasez de medicamentos e insumos por la que atraviesa el sistema de salud en Cuba, clínicas dentales han empezado a utilizar la homeopatía en sustitución de la anestesia.
La emisora Radio Llanura de Colón, de Matanzas, publicó un artículo en el que alaba este procedimiento como si fuera lo más novedoso y eficiente del mundo.
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"En Colón están sacando muelas sin anestesia. No obstante, aparte de su mente cualquier imagen de tortura o salvajismo, porque se sustituye la anestesia con fármacos industriales por gotas homeopáticas, una modalidad de la Medicina Natural y Tradicional (MNT) con probada efectividad", aseguró el reporte.
De acuerdo con el texto, las gotas provocan en el paciente una analgesia profunda en la que este percibe toda la manipulación operatoria, pero no sienten dolor.
Se administran diluidas en agua entre 15 o 20 minutos antes de la extracción dentaria, luego se aplican otras cinco gotas sublinguales justo antes del procedimiento quirúrgico, e igual cantidad al concluir la exodoncia.
Según la doctora Osdanay Cabrera González, esa técnica para la extracción dentaria es muy beneficiosa para pacientes cardiópatas, hipertensos, diabéticos o para quienes tienen fobia a las agujas.
El método se está empleando en la clínica 27 de noviembre y en el Departamento de Estomatología del policlínico Carlos Juan Finlay, y entre sus beneficios se cita que el proceso postoperatorio transcurre generalmente sin complicaciones.
Una de las pacientes atendidas con esta modalidad, una anciana de 70 años que padece presión arterial elevada, describió que sintió "una sensación rara, pero nada que no se pueda soportar".
En pleno siglo XXI, los centros de salud cubanos acuden a un sistema de medicina alternativa del siglo XVIII que ha sido descalificado por la comunidad científica mundial, basada en estudios que aseguran que es inútil para tratar enfermedades.
Según esta terapia, para curar a una persona hay que usar la misma sustancia que causa sus síntomas, pero diluida en agua hasta proporciones infinitesimales.
La falta de anestesia en Cuba, como la de muchos otros medicamentos, ha provocado que cada vez más personas traten de conseguirla en el mercado informal, lo cual tiene sus riesgos, advierten los médicos.
El mes pasado, las autoridades de Sancti Spíritus prohibieron a las clínicas dentales usar anestesia que haya sido traída desde el extranjero por particulares, porque puede poner en peligro la vida del paciente.
Dariel Álvarez Rojas, jefe de la sección provincial de Estomatología, dijo que quien compre anestesia dental en el mercado negro perderá el dinero, -un frasco cuesta entre 500 y 600 pesos en Revolico-, porque no se le aplicará en ningún centro de salud.
"La anestesia dental, por la forma en la cual se le administra al paciente, que va directamente al nervio a través de técnicas infiltrativas, sí puede poner en riesgo la vida de la persona, por lo que solo empleamos la que tenemos certificada por la autoridad reguladora de Cuba (Cecmed)", puntualizó.
Otros recursos como la amalgama y la resina sí se aceptan, pero la indicación es que a cada frasco de anestesia se le verifique la fecha de vencimiento y otros datos en el envase, incluido el certificado de la institución que lo elaboró.
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