Las protestas contra el equipo Cuba de pelota que este domingo disputará en Miami la semifinal del Clásico Mundial comenzarán este sábado 18 de marzo con una manifestación organizada por Vigilia Mambisa frente al emblemático restaurante Versailles, en la calle Ocho.
“El sábado a la una de la tarde vamos a traer la aplanadora mambisa para escachar bates y pelotas como símbolo de la tiranía castrocomunista, porque no los aceptamos, no los queremos aquí”, dijo en declaraciones a America Tevé, Miguel Saavedra, uno de los líderes de la conocida organización de exiliados.
La activista cubana Thais Mailén Franco, arribada hace pocos meses a Miami, tiene pensado participar en las protestas, que en el caso del domingo están convocadas para comenzar sobre las 6 pm (hora local) en las inmediaciones del estadio LoanDepot Park, sede del encuentro deportivo.
“No hay forma de que un juego de pelota aquí sea digno cuando hay más de mil presos políticos, cuando hay tanto sufrimiento de las madres, cuando los niños no tienen qué desayunar, cuando tú no puedes salir, ni un periodista, ni un médico ni un cubano de a pie, ni una madre a exigir la libertad de su familiar que está preso por el 11J”, dijo Franco.
“Lo que más nos molesta es que le hayan dado visa a los representantes de Cuba, que es un país que está en la lista de países terroristas enemigos, cómo no le dan visa a personas decentes que quieren venir a reunirse con su familia y les dan visa a estos indeseables”, indicó por su parte la exiliada Laura Vianello.
Osvaldo Hernández, integrante de Vigilia Mambisa, subrayó que “algunos peloteros son castristas” y citó el ejemplo de Alfredo Despaigne, a quien calificó de “comunista envenenado”, lo que asegura que quedó demostrado en el reciente encontronazo que mantuvo con Raisel Iglesias.
“Nuestra manifestación va a ser en contra del encarcelamiento de los presos políticos, en contra de la opresión de la dictadura contra su propio pueblo, en contra de los abusos de los derechos humanos en el país, casi seguro hay jugadores que quieran desertar, deben saber que el destierro siempre los va a recibir con los brazos abiertos”, dijo Ramón Saúl Sánchez, líder del Movimiento Democracia.
“Yo saqué mi ticket porque creo que es una excelente oportunidad para abogar por la libertad de cuba, abogar por los presos políticos, rugir en nombre del fin del comunismo, el fin del totalitarismo en cuba y que se oiga el grito de miami, el grito del exilio”, opinó el exiliado José Alberto.
La selección cubana de pelota, que arribó en horas de la madrugada del jueves a Miami tras un agotador viaje de 17 horas de Japón, tuvo jornada descanso el 16 de marzo y tiene previsto entrenar este viernes 17.
El equipo cubano estaría hospedado en el hotel Wyhham, en la ciudad de Jupiter, en el condado de Palm Beach, a unas 90 millas de la ciudad de Miami, según reseñó America Tevé.
El influencer Alexander Otaola había anticipado que ocurrirían protestas incluso desde antes de que la selección cubana llegara a semifinales y se confirmara que por primera vez un equipo Cuba de béisbol jugaría en la ciudad de Miami, algo que no había ocurrido nunca desde que el castrismo llegó al poder.
En mayo de 2021, el debut del equipo cubano en el Torneo Preolímpico de las Américas se convirtió en una manifestación anticastrista, ya que decenas de cubanos se congregaron en el lugar con pancartas contrarias al régimen y entre gritos de "¡Abajo el Comunismo!", "¡Abajo la dictadura!", "¡Abajo Díaz-Canel", "Patria y Vida", entre otros.
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