La Organización de Naciones Unidas (ONU), a través del Programa Mundial de Alimentos (PMA), culpó a la Tarea Ordenamiento de la crisis alimentaria que sufren los cubanos
"Esta reforma aún no ha logrado los resultados deseados. Por lo tanto, la escasez de productos básicos y el aumento de los precios mundiales de los alimentos contribuyeron a la inflación nacional. El PMA seguirá supervisando los efectos de la reforma, especialmente en la seguridad alimentaria de los hogares de bajos ingresos", destacó el Informe Anual de País 2022.
Aunque Cuba ocupó el puesto número 83 en el Informe sobre Desarrollo Humano 2021-2022, por encima de la mayoría de los países de la región, ese organismo internacional reconoció que "la reforma monetaria redujo los subsidios alimentarios".
Esto trajo como consecuencia que la inflación se comportara por encima de lo previsto, así como un aumento en la brecha de desigualdad provocada por la dualidad monetaria, precios más altos de bienes y servicios básicos, hogares vulnerables ante la inseguridad alimentaria, entre otros.
"Como resultado, el país experimentó escasez de alimentos, incluidos los principales cereales (harina de trigo, arroz y maíz), frijoles, verduras, productos lácteos y carne (res y cerdo)", resaltó el texto.
Esa organización de la ONU mostró preocupación por la limitada diversidad dietética de los cubanos y el incumplimiento de las recomendaciones nutricionales para todos los grupos de edad, a pesar de que el estado vende algunos alimentos de manera racionada.
Los cubanos no consumen el 24 % de las proteínas y el 18 % de las grasas que recomienda el PMA y la dieta del promedio de los hogares del país "es pobre en micronutrientes".
Esto provoca que poco sano o diverso, al no tener acceso libre y estable a alimentos en el mercado nacional, destacó el informe.
Los sectores sociales más afectados por esta crisis son los que perciben ingresos más bajos (jubilados y trabajadores públicos sin acceso a divisas extranjeras), ya que el salario mínimo de Cuba, 2,100 CUP, es insuficiente para cubrir las 2,300 kcal recomendadas.
El PMA reconoció que el gobierno cuenta con programas para alcanzar lo que denominan "soberanía alimentaria", pero persiste la baja productividad agrícola, las pérdidas en cosechas y un acceso limitado al mercado internacional.
Para paliar la crisis, Naciones Unidas ofreció ayudas y donaciones a Cuba en los últimos años, con el objetivo de que algunos grupos vulnerables (niños, las mujeres y niñas embarazadas y lactantes y los ancianos) tengan acceso a alimentos y nutrientes.
El gobierno cubano recibió micronutrientes en polvo y leche para los niños de entre 6 y 23 meses de nacidos, fundamentalmente residentes en las provincias orientales, según el PMA.
Asimismo, trabajaron con cooperativas agropecuarias para incrementar la producción de alimentos a nivel local, para que escuelas y comedores sociales pudieran beneficiarse de las ayudas.
Tras el paso del huracán Ian, en 2022, los damnificados de las provincias Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque y el municipio especial Isla de la Juventud, se beneficiaron de un plan alimentario de dos meses.
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