Un cubano logró salvarse a última hora de ser deportado a Cuba, aunque aún no sabe qué le depara el futuro en Estados Unidos, según fuentes familiares.
Dachel Caballero fue trasladado al Aeropuerto Internacional de Miami para ser deportado este miércoles a La Habana, tras haber sido detenido días antes cuando se presentó a su cita de inmigración en Miami Lakes, contaron sus familiares este jueves a Univisión 23.
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Pero en el último minuto, Caballero fue regresado, antes de que saliera el avión con 66 cubanos deportados en el segundo vuelo organizado por el Departamento de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
No obstante, la incertidumbre permanece, ya que Caballero, quien es padre y esposo, no sabe qué va a pasar con él, según declaraciones al canal de noticias.
Caballero fue detenido con una I-220B porque perdió su caso de asilo político ante las autoridades migratorias, y fue arrestado y trasladado a la ciudad de Miramar, en el condado de Broward, donde estaba listo para ser deportado.
Su esposa, Yudisleidy Molina, había relatado al periodista Alexis Boentes, de Telemundo 51, que originalmente su cita era para el 12 de junio, pero que el lunes lo llamaron y le dijeron que ese día la oficina estaría cerrada y que tenían que adelantársela.
"Era como una trampa, los de emigración estaban en la oficina. Él no los vio ni nada, cuando él entró parece que ya estaban allí, ni se dio cuenta de que lo estaban esperando. Él entra y ya le fueron arriba, le dijeron que iba a ser detenido", contó.
Caballero entró ilegalmente a Estados Unidos hace cuatro años, y el gobierno le entregó un documento I-220B (una orden de deportación).
Tras ser liberado del centro de detención, se le colocó un grillete electrónico y se le impuso la obligatoriedad de comparecer a reportarse regularmente en oficinas de ICE.
En este periodo en libertad, el joven tramitó su permiso de trabajo, estudió y actualmente trabajaba como electricista. Vive con su esposa y su hijo pequeño.
"Tengo mi centro de trabajo, hago mis taxes, tengo todos mis documentos en regla, licencia, todo...", dijo el joven días atrás.
Su esposa organizó una protesta este martes por la tarde frente al Krome North Service Processing Center para pedir su liberación. Al lugar acudieron otros cubanos con I-220B y familiares de detenidos en centros de inmigración.
"Le dijeron [en la citación] que eran 10 minutos, que no se preocupara, que él de ahí iba a ir para el trabajo", contó Yudisleidy a Telemundo 51.
La mujer pidió una oportunidad para su pareja, aseguró que no es ningún delincuente y que lo único que ha hecho en Estados Unidos es trabajar para tratar de salir adelante.
Este miércoles llegó a la capital cubana el segundo grupo de cubanos deportados por el gobierno de Estados Unidos, tras un operativo que es parte de las medidas de emergencia implementadas por la administración de Joe Biden en vísperas de la suspensión de la orden sanitaria conocida como Título 42, que pronostica una avalancha de inmigrantes por la frontera sur.
Este es el segundo vuelo de deportación de cubanos que se realiza desde el 29 de diciembre de 2020 y según un portavoz de ICE en un comunicado enviado a CiberCuba, esta entidad continuará aplicando las leyes de inmigración de Estados Unidos, trabajando en colaboración con otras agencias del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para facilitar "el procesamiento seguro, ordenado y humano de los inmigrantes", lo que incluye el procesamiento y la expulsión expedita de las personas sin base legal para permanecer en el país.
También el Departamento de Estado ha insistido en que la política de devolución de inmigrantes irregulares a Cuba va a reforzarse, además de reiterar que los vuelos van a duplicarse en las próximas semanas.
Las autoridades estadounidenses han procedido a detener a numerosos inmigrantes cubanos que habían perdido sus entrevistas de miedo creíble al entrar al país y habían recibido un documento I-220B, pero se mantenían en libertad bajo supervisión.
Las detenciones se incrementaron desde comienzos de abril, luego de una ronda de conversaciones migratorias entre delegaciones de Cuba y Estados Unidos en Washington DC, en la que la representación cubana se comprometió a reanudar el recibimiento de deportables y autorizar al menos dos vuelos mensuales.
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