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Un apagón ocurrido el jueves por la noche en el Hospital Clínico Quirúrgico Joaquín Albarrán, conocido popularmente como Clínico de 26, en La Habana, obligó a una evacuación urgente de los pacientes graves y críticos.
Según la información que dio la dirección del centro a los familiares de los enfermos, hubo una falla eléctrica como consecuencia de un incendio. Este fue controlado rápidamente, pero no se pudo evitar el corte del servicio eléctrico.
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La noticia la dio la agencia independiente CubaNet gracias a un colaborador que accedió al hospital cuando se estaba haciendo la evacuación y grabó un breve video.
Varias testigos le dijeron que al principio "se sintió olor a gas y después hubo un incendio que afectó el cableado eléctrico".
Las malas condiciones del Clínico de 26 han derivado en varias quejas en redes sociales.
A finales de enero del año pasado, el periodista independiente Luis Cino llegó a cuestionar si aquel lugar, donde estaba acompañando a una tía que se fracturó la cadera, era una "sala de exterminio".
"La comida es bazofia y llevo dos días sin bañarme porque no hay agua. No hay médico y a mi tía nada le han hecho", dijo.
"Aquí hay varios enfermos esqueléticos, sucios, desnudos que no tienen acompañante. ¿Será esto una sala de exterminio?", inquirió.
Al poco tiempo, Cino comunicó que su denuncia había surtido efecto.
"Un día después de aparecer mi denuncia en las redes sociales hubo una inspección. Todo empezó a mejorar e hicieron una encuesta a los acompañantes de los pacientes", explicó.
El periodista aclaró ahora que sus quejas no son sobre "los médicos, enfermeras y demás personal del hospital, sino sobre las condiciones materiales de deterioro y escasez y la calidad de la comida" de la institución hospitalaria, e hizo recaer la responsabilidad en los funcionarios del Ministerio de Salud Pública.
"El problema no son los camilleros, sino la falta de camillas; el problema no está en la cocina, sino en los suministros que reciben los cocineros; el problema no son las enfermeras, sino el esparadrapo que no tienen para poner los sueros", recalcó.
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