Orestes Lorenzo Pérez, el piloto cubano que protagonizó una de las historias más increíbles de fuga del país al escapar de la Isla en un avión militar y luego volver en un Cessna 310 a buscar a su esposa e hijos, anunció su jubilación y nuevos proyectos de producción de contenidos para redes sociales.
“Vicky y yo hemos alcanzado la jubilación, y con ello nos enfrascamos en un nuevo proyecto: nuestro canal de YouTube para los hispanoparlantes, que vamos a refrescar con nuevo contenido, mejor apariencia, fotografía y edición”, anunció este viernes el piloto en su Facebook.
‘Tras el horizonte’ es el nombre del canal donde el piloto y su esposa, María Victoria Rojas (Vicky) se proponen contar “las historias de gente común que han vencido las dificultades en el camino a la felicidad”.
El canal, activo desde septiembre de 2011, ha venido compartiendo contenidos relacionados con la aviación, la naturaleza y entrevistas sobre temas de interés general, con un enfoque particular sobre las historias personales y más inspiradoras que se esconden en la gente común.
Ahora, con más tiempo para dedicarle, el matrimonio de cubanos quiere seguir con esa línea editorial y añadir “charlas con expertos sobre temas de interés general”.
“Documentaremos nuestras aventuras explorando los paisajes más remotos. Viajaremos al lugar donde se encuentre quien acepte compartir con nosotros su historia de lucha, fracasos, sacrificios y la perseverancia que los ha llevado al éxito”, prometió la pareja que protagonizó una de las aventuras más riesgosas para escapar del régimen.
Para el periodista cubano afincado en Miami, Wilfredo Cancio, “el vuelo por la reunificación familiar de Orestes Lorenzo aquel atardecer de diciembre de 1992 no solo dejó las trazas de una hombradía entre Cuba y Miami, sino que puso a relieve internacional la vulnerabilidad moral y la cruel intolerancia de un régimen para el que la unidad de la familia está subordinada a los intereses de conducción política y obediencia ideológica”.
La historia terminó con final feliz, pero pudo haberse convertido también en un fiasco, con ganancia propagandística para el régimen, según Cancio; que resaltó la voluntad de la familia Lorenzo (su esposa, y sus hijos Reyniel, de 11 años, y Alejandro, de 6) para ajustarse a un plan milimétrico que puso a prueba toda la destreza de Lorenzo como piloto para llegar a Cuba sin ser detectado por los radares, aterrizar y despegar en el punto exacto de una carretera donde su familia le esperaba.
"Ese día representó una pequeña victoria de las familias cubanas. Precisamente la familia ha sido el blanco devastador de la tiranía. Ojalá el día no esté lejano en que las familias cubanas se consoliden y sirvan de pilar a una nueva y justa nación", comentó Lorenzo a CiberCuba en diciembre pasado. "Sin familia no hay nación. La patria comienza en ella".
Retenida en Cuba como castigo por la fuga aérea protagonizada en 1991 por el piloto militar, al escapar en un caza Mig-23 del ejército, la familia de Lorenzo simboliza el sacrificio y el valor de los cubanos en su empeño por procurarse una vida digna y permanecer unidos a pesar de la dinámica disgregadora del sistema totalitario cubano.
“Las historias más inspiradoras, de las que más podemos aprender, se esconden en las vidas de las personas sencillas, en sus luchas cotidianas contra las adversidades”, defienden Orestes y Vicky, un matrimonio que en su jubilación quieren dedicar su tiempo y su talento a dar visibilidad a historias ejemplares como la suya.
Las personas que quieran ponerse en contacto con ellos para compartir sus historias lo pueden hacer escribiendo al correo lorenzoswings@gmail.com. Los nuevos contenidos del canal de YouTube empezarán a a salir regularmente en un par de semanas.
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