Dramáticas imágenes grabadas con las cámaras corporales de dos agentes de policía de Florida muestran los angustiosos momentos en que rescatan a un niño de cuatro años, con autismo, que flotaba peligrosamente en un estanque.
Agentes de la Oficina del Sheriff del condado de Hillsborough acudieron poco antes de las 10:30 a.m. del pasado martes a Valleyridge Court, luego de la llamada al 911 de un hombre preocupado por un niño pequeño que había cruzado una calle corriendo y se había sumergido en un estanque cercano, según un comunicado de la Policía.
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Dos agentes, una mujer y un hombre, llegaron al lugar y de inmediato comenzaron a buscar al niño en el agua.
"Justo allí, en el borde del agua. ¿Ves su cabeza? Está sentado justo ahí, en el borde del agua", dice la ayudante del sheriff a su colega en el video, en el que se escuchan los gemidos del pequeño.
De acuerdo con el comunicado, el menor se mantenía a flote gracias a los espesos arbustos de la orilla del estanque, lo que agravaba la situación.
"Me voy a empapar, voy a ir por él", dice el oficial, y su colega le responde: "No sé cómo ha llegado hasta allí".
Ambos agentes se abren paso entre la hierba alta y la maleza antes de rescatar al niño, que sólo llevaba puesto un pañal.
"Me estoy hundiendo en la tierra", comenta el policía antes de entregar el niño a su compañera.
Luego de rescatarlo, los agentes descubrieron que el pequeño no hablaba.
"No paraba de hundirme y hundirme, no sé hasta dónde habría llegado esto", comentó la agente, luego de que los tres estuvieron a salvo.
"Apenas podía sujetarle, porque mis pies se hundían mucho", confesó el policía. "Habría sido un mal día".
Mientras los oficiales dialogan, se ve en el video cómo la agente seca al pequeño con una toalla y lo mantiene abrigado en un asiento delantero de la patrulla policial.
Según las autoridades, el niño no sufrió lesiones que pusieran en peligro su vida y se reunió con su familia.
"Me estremezco al pensar en el resultado si no hubiera sido por la tenacidad y los esfuerzos de estos agentes", declaró el sheriff Chad Chronister. "Ahora trabajaremos con el Departamento de Menores y Familias para determinar si la negligencia desempeñó algún papel en la desaparición de este niño".
La investigación para esclarecer los hechos está en curso.
Incidentes similares ocurridos recientemente en Florida no siempre han tenido un final feliz. En junio último, en el condado de Charlotte, fue encontrada sin vida la niña de cuatro años Evelyn K. Geer, que padecía autismo, a la orilla de un canal detrás de la casa de alquiler donde se alojaba con su familia.
En abril, dos hermanos gemelos de 13 años murieron ahogados en un estanque de Miami-Dade, luego de que uno cayera al agua por accidente y el otro se lanzara para intentar salvarlo.
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