Camioneros que transportaban de manera ilegal tomates para La Habana fueron detenidos por autoridades de Cienfuegos, según información oficialista trascendida en redes.
Agentes del Ministerio del Interior de Cuba (MININT) detuvieron primero a un camión particular cargado de tomates, sin documentación legal en el municipio de Abreu, con destino a La Habana, apuntó este martes el perfil en Facebook de los CDR Municipal de Cienfuegos.
Posteriormente se detuvo a otro camión estatal arrendado, perteneciente a TABACUBA, con documentos falsos, que transportaba tomates, pepinos y papa para la venta en el mercado informal de la capital cubana, según el citado perfil.
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También refieren que “los detenidos fueron imputados y responden a un proceso penal” y que la carga se entregó a la empresa de Acopio para su distribución en hospitales y círculos infantiles.
No es la primera vez que perfiles oficialistas informan sobre la detención de productos con destino al mercado informal, que ha ido creciendo en la medida que ha escalado la crisis general de desabastecimiento en el país.
Además, en los últimos meses tanto la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) como el MININT han lanzado una ofensiva en redes sociales en su voluntad de visibilizar los decomisos de productos destinados a la venta en el mercado negro, al tiempo que elogian la rapidez con que se persiguen esos delitos.
Recién, otro camión fue detenido en Santa Clara, Villa Clara, mientras transportaba cientos de paquetes de varios tipos de pescado, según detalló en redes sociales Fuerza del Pueblo, perfil vinculado al MININT.
En esa ocasión fueron decomisados casi 200 paquetes de filetes de pescado de mar; 90 paquetes de masa de macabi; 35 paquetes de curbino; 200 unidades de pargo entero y 240 unidades de pescado de mar.
En los comentarios de la publicación internautas bromearon sobre la confiscación de un producto tan escaso en el país como el pescado, devenido en alimento de choteo por lo extraño que resulta en la mesa de los cubanos, a pesar de ser Cuba una isla.
En junio último, la viceministra de la Industria Alimentaria, Mydalis Naranjo Blanco, afirmó en el programa oficialista Mesa Redonda que la falta de pescado en los comercios se debía a la falta de peces en las aguas del país.
“Aunque somos un país que está rodeado de mar, nuestras aguas no poseen los niveles de pescado que necesitamos para cubrir la demanda de la población, para satisfacer esta demanda creciente”, dijo la funcionaria, en una afirmación que se viralizó en redes sociales provocando indignación y burlas entre los cubanos.
El significativo decomiso de cientos de paquetes de pescado tuvo lugar a pocos de la confiscación de otro importante cargamento de comida, en ese caso en Guantánamo, donde fueron confiscados casi cinco mil kilos de arroz, chícharos, azúcar, espaguetti y casi 200 latas de sardinas en una casa guantanamera que funcionaba como almacén.
En ese caso los alimentos decomisados -hecho por el que fueron detenidas tres personas por Especulación y Acaparamiento- pertenecían a los módulos alimentación que se venden a la población.
Tanto en Guantánamo como en el más reciente decomiso de pescado en Villa Clara, la magnitud del defalco pone en evidencia la presunta corrupción institucional que hay detrás de tal desvío de recursos al mercado informal.
La corrupción en el ámbito estatal es un mal de larga data en Cuba, que suele dispararse en épocas de aguda crisis económica como la que atraviesa la isla.
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