La actitud de un botero que este miércoles se negó a dejar subir a su vehículo en el municipio Cabaiguán, en Sancti Spíritus, a un niño al que le faltaban 30 pesos para cubrir el costo del pasaje, generó indignación en redes sociales.
Anielbys Fernández Ruiz, un cubano que se identificó como testigo directo de la escena relató que estando en la piquera para coger una máquina para Sancti Spíritus, llegó un niño que tendría unos 11 ó 12 años que le preguntó al chofer cuánto costaba el pasaje hasta la localidad de Guayos, a lo que el conductor contestó que 100 pesos; precio al que el menor reaccionó diciendo: "¡Ño, 100 pesos hasta Guayos!".
Según la fuente, el conductor acto seguido aclaró que él cobra directo de Cabaiguán a la ciudad de Sancti Spíritus, y que si deseaba montar tenía que pagarle el pasaje completo.
Al decirle el menor que solo tenía 70 pesos, el chofer le dijo que fuera a “coger botella”, que cogiendo botella llegaba pronto.
“Les digo que yo pensé que el chofer le iba a decir, ‘no importa, móntate que yo a ti no te voy a cobrar o por lo menos que le iba a cobrar los 70 pesos que el niño tenía, pero para mi sorpresa esa no fue la respuesta, el muy HP lo mandó a que fuera a coger botella, que cogiendo botella llegaba rápido, porque Guayos estaba a solo tres kilómetros”, contó el denunciante.
"¿Podrá ese HP chofer disfrutar el dinero? ¿Su sucia conciencia no le pesará al poner la cabeza en la almohada? ¿De verdad se han deteriorado tanto los valores en algunas personas? ¿Cómo es posible que pese más la avaricia, la codicia, la ambición, qué la sensibilidad, la empatía, la solidaridad?”, cuestionó.
El testigo cuenta que las 11 personas que vieron lo sucedido se mostraron dispuestos a ayudar al niño.
“Ya habíamos sacado 200 pesos para el pasaje, los 100 de nosotros y los 100 de aquel niño, que ya no tenía 70 pesos, sino 1,100 pesos, porque todavía somos más los que estamos dispuestos a ayudar", aseguró.
Cuenta que al final el pasaje del menor de edad lo pagó un matrimonio que no permitió que los demás contribuyeran.
En el apartado comentarios a la publicación, un internauta dijo que los choferes cobran 100 hasta Sancti Spíritus, pero que si el pasajero se queda en Guayos, los conductores suelen cobrar 50 y en esa localidad montan a otro al que le cobran los otros 50 hasta el municipio cabecera.
"Así fue, el niño se quedó en Guayos y ahí montó otro pasajero, pero le cobró 100 pesos, no 50", subrayó Anielbys Fernández.
Decenas de internautas reaccionaron con profunda molestia por lo ocurrido y prefirieron quedarse con la positiva experiencia de que todavía hay personas de buen corazón dispuestas a ayudar al prójimo.
“Triste historia, pero es la realidad hay una gran pérdida de valores humanos, por suerte todavía quedan buenas personas"; “¿Hasta dónde llega la ambición, la falta de sensibilidad y de humanismo de ese chofer? ¿Tendrá hijos y nieto?; "Para los avariciosos no hay niños ni ancianos, es el egoísmo que nos come", fueron algunas de las opiniones de rechazo.
Esta denuncia no es la única de su tipo en los últimos meses. A comienzos de julio, una cubana relató en redes sociales la falta de humanidad de un taxista de una agencia estatal que se negó a llevar a su madre de 78 años desde un hospital hasta su casa, en La Habana, por faltarle 100 pesos del precio que él había puesto a la carrera, que era de 600.
Explicó que el desagradable incidente ocurrió a la salida de un turno médico con una anciana que tiene problemas de columna, que usa un bastón por la dificultad que tiene para caminar, y después de dos horas de espera en el hospital sin comer desde el día anterior, porque la prueba médica que iba a hacerse así lo requería.
No obstante, en redes también trasciende a menudo el relato de muestras de solidaridad de otros boteros o choferes que llevan gratis a algunas personas o que están dispuestos a aceptar a pasajeros que no llevan el importe requerido.
Hace algunas semanas se conoció el caso de un chofer de ómnibus de Santiago de Cuba que traslada gratis a niños y adolescentes cuando van a la escuela por la mañana.
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