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El desabastecimiento de medicamentos regulados por el llamado tarjetón ha alcanzado dimensiones críticas en las últimas semanas en Las Tunas.
Actualmente, según reconoce la prensa oficialista local, del total de 86 tipos medicamentos que se controlan por los tarjetones, 35 totalmente en falta en los almacenes.
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Entre los medicamentos en falta, destacan el alopurinol, enalapril, metildopa, omeprazol, teofilina, colchicina y las tabletas de ketotifeno.
Además, 19 presentan baja cobertura y solo 31 se recibirán en su totalidad en las farmacias de la provincia oriental.
La situación es “muy crítica”, reconoció Arianna Pupo Vázquez, especialista comercial de la Dirección de Farmacias y Ópticas de esa provincia.
La falta de materias primas para las producciones nacionales y los problemas en la importación de 20 fármacos son las causas fundamentales de esta situación, se justifica la funcionaria.
El desabastecimiento de medicamentos en esa provincia ya se ha vuelto habitual y un reflejo de la crisis que se extiende a todo el país.
En junio solo se recibía en Las Tunas el 18 % de los fármacos que necesitaba la población, y muchas veces no se cubría toda la demanda, por lo que se debió racionar la venta.
En Las Tunas, existen 108 farmacias comunitarias, de las cuales 30 se encuentran en el municipio cabecera. El cuadro básico de medicamentos lo conforman 286 fármacos, de los cuales 86 están bajo control y 20 son completamente importados.
En julio pasado, el gobierno reconocía que un total de 251 medicamentos de los que se fabrican en Cuba están en falta, lo que representa el 40 % de los del cuadro básico.
De los 12 medicamentos de tarjeta control de mayor número de pacientes inscritos, por ejemplo, terminaron afectados cinco de ellos.
Las autoridades achacan las causas de los problemas en la producción de medicamentos a la no disponibilidad de las materias primas y materiales necesarios para la producción (en el 94 % de las de los casos); y las roturas en las plantas de producción (6%).
El discurso oficial, lejos de asumir su cuota de responsabilidad, continúa acusando a Estados Unidos y el embargo de la razón por la que no hay medicinas en Cuba, argumento que para muchos expertos en relaciones internacionales es insostenible, por la propia naturaleza que sostienen las sanciones contra el gobierno comunista cubano.
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