El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) entregó una silla de ruedas eléctrica a un hombre discapacitado residente en Camagüey.
La organización no gubernamental logró hacer el donativo mediante un proyecto de colaboración para la solidaridad con personas vulnerables en Cuba.
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"El proyecto 'Más que palabras', que auspicia el OCDH, ha logrado hacer llegar esta silla de ruedas eléctrica a este joven, discapacitado y necesitado, en la provincia de Camagüey", dice un mensaje publicado en las redes sociales de la ONG.
"Gracias a Dios y al proyecto porque me dieron esta silla de ruedas que yo necesitaba", dijo Yoel León, el cubano beneficiado con esta acción solidaria.
León reaccionó con mucha felicidad al recibir la silla de ruedas eléctrica que mejorará considerablemente su calidad de vida.
Antes, este camagüeyano discapacitado usaba una precaria silla, una especia de adaptación de una bicicleta, porque el gobierno cubano asegura que no tiene recursos para mejorar las condiciones de vida de las personas con problemas de movilidad física y otros padecimientos, en el país.
La escasez de medicamentos y artículos de todo tipo vinculados a la salud es muy notable en Cuba. Esto implica que muchas personas que sufren de distintos tipos de discapacidad no encuentren solución a sus padecimientos.
El estado cubano no tiene dinero para hacer frente a las carencias de su población pero sí destina importantes recursos a las acciones represivas para mantenerse en el poder.
En febrero el OCDH reportó 340 acciones represivas contra activistas, opositores y periodistas independientes. Del total de denuncias, 115 fueron detenciones arbitrarias a personas con ideas políticas contrarias a las del gobierno.
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