Residentes en la provincia de Sancti Spíritus han expresado su preocupación por un incremento de la tarifa eléctrica durante los meses de julio y agosto.
Según trascendió en el diario local Escambray varios cubanos han notado un aumento considerable de su factura en los meses de verano y cuestionan si las cuentas son correctas o se cobró más de lo consumido.
Sin embargo, Darío Peña Cuenca, director comercial de la Empresa Eléctrica Sancti Spíritus (EESS), justificó el aumento con un incremento en el consumo de electricidad "en función de la temperatura".
En su opinión, la tarifa eléctrica del sector residencial de Cuba no ha cambiado durante 2023, el precio promedio es el mismo del año anterior, pero los montos de la cuenta son más elevados porque "ha habido un fenómeno sin precedentes y es que ha crecido mucho el consumo per cápita por viviendas en todo el territorio espirituano".
Aunque el directivo reconoció que pueden existir errores en las lecturas de los contadores de consumo eléctrico en las viviendas, responsabilizó del alto consumo a los cubanos y el uso de los equipos electrodomésticos.
"Una de las cargas fundamentales que tienen los inmuebles son los equipos de climatización y refrigeración, ambos asociados a la temperatura. En la medida que esta se incrementa, también lo hace la cantidad de tiempo que se usan los ventiladores y aires acondicionados, y en el caso de estos últimos cuando suben los grados en el espacio exterior, su régimen de funcionamiento es mucho mayor para mantener desde el calor exterior el frescor deseado en el interior del inmueble y esto hace que sea mayor el tiempo total de la conexión del equipo", dijo.
No obstante, aclaró que el consumidor tiene derecho a reclamar en caso de que la lectura y la cuenta no se correspondan con sus registros.
En ese caso, indicó, cuando la persona recibe su aviso de consumo los primeros días del mes, tiene 10 días hábiles para pagar o efectuar su reclamación.
En medio de un incremento de apagones por la inestabilidad del Sistema Electroenergético Nacional y una mayor vigilancia del robo de electricidad, muchos cubanos se han quejado por el aumento de sus tarifas en varias partes de Cuba.
En julio, un activista cubano denunció un sorprendente y alarmante aumento en la factura eléctrica de su hogar, cuestionando la gestión y los cobros por parte de la única empresa eléctrica que hay en Cuba.
En su casa siempre se pagó alrededor de 100 pesos de corriente eléctrica, sin embargo, tras el fallecimiento de su abuela y la disminución de uso de electrodomésticos, el consumo mensual bajó unos 16 pesos, lo cual era completamente entendible dado que él no se encontraba en casa y solo se mantenían encendidas algunas luces exteriores y el refrigerador.
Sin embargo, su último consumo había sido de 563 pesos, un aumento desproporcionado en comparación con el promedio que solía tener la vivienda.
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