La emblemática rueda de madera, marca distintiva de La Carreta, uno de los restaurantes más célebres de La Habana, ha vuelto a su lugar de siempre.
Así lo anunció este jueves la gerencia del restorán en sus páginas de Facebook: “Ya nuevamente se ha colocado la icónica rueda del Restaurant La Carreta Cuba”, con una foto donde se ve la rueda en el sitio que siempre ocupó, recostada al pie de un árbol, en una de las esquinas que forman las calles 21 y K, del Vedado habanero.
En la foto aparece también otra rueda, en uno de los parterres de K, lo que hizo notar un usuario que comentó la publicación: “Ahora con dos ruedas, para rodar mejor”.
La Carreta reabrió al público el primero de julio pasado, bajo gestión privada, luego de una reconstrucción a fondo que le devolvió la vida a un inmueble en ruinas, tras ser clausurado y abandonado a su suerte por las instancias estatales.
El nuevo local, en el mismo sitio del corazón del Vedado donde funcionó desde su fundación, tiene ahora una fachada que conserva la estructura original, aunque el diseño es mucho más atractivo.
Las paredes de ladrillo, sus puertas y ventanas de madera y cristal, y la homogeneidad con el entorno urbano donde está enclavado, distinguen al establecimiento especializado en comida cubana.
Su carta muestra platos típicos de la culinaria nacional como picadillo a la habanera, ropa vieja, vaca frita, chilindrón de carnero y masas de cerdo fritas, entre otras delicias.
Desde hace años, La Carreta había pasado a engrosar la larga lista de negocios que el gobierno, con su ineficiente gestión, dejó caer en el abandono.
Aunque en 2018, durante un recorrido por restaurantes “de lujo” de La Habana, el secretariado del Sindicato Nacional de los Trabajadores del Comercio, la Gastronomía y los Servicios anunció que La Carreta estaría incluida en un proceso de recuperación de centros gastronómicos insignes de la capital, eso nunca ocurrió.
En 2019 se denunció su calamitoso estado físico, con señalizaciones de peligro de derrumbe. Entonces, se comentó que sería reparado por el gobierno de la capital, pero quedó en el olvido como otros tantos sitios de la ciudad.
En 2021 se publicaron imágenes del interior del restaurante. El inmueble quedó sin ventanas, los suelos fueron levantados losa por losa, aunque todavía permanecían las paredes enchapadas en madera.
En marzo de 2022, el gobierno tapió con bloques las paredes y ventanas del local para evitar que personas siguieran entrando a llevarse fragmentos de la madera de las paredes, tomacorrientes, azulejos y otros accesorios.
A inicios de noviembre del año pasado, vecinos de la zona denunciaron la desaparición de la rueda de madera que por décadas fue un símbolo del restaurante.
Tras varios años cerrado, en espera de una reparación que nunca llegó, el popular restaurante fue demolido en noviembre de 2022, ante el asombro e indignación de los habaneros.
La Carreta fue uno de los rincones clásicos de la bohemia habanera, particularmente en los años 60 y 70 del pasado siglo, y lugar de visita frecuente para quienes disfrutaban degustar platos típicos cubanos, con una excelente elaboración.
Los cubanos que emigraron hace décadas a Estados Unidos decidieron revivir la experiencia de deleitarse y comer rico, como en tiempos pasados hicieron en La Habana, y una muestra de ello fue el surgimiento del restaurante La Carreta en Hialeah, Miami.
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