Los cubanos reaccionaron en las redes sociales ante los abusivos precios de los productos agrícolas que están a la venta en un mercado de La Habana.
El post original donde se reflejan estos precios es del usuario de Facebook Ottamy Ceballos. Explicó que hizo las fotos para demostrar el alto coste de los alimentos en Cuba porque muchas personas en el exterior no le creían.
CiberCuba se hizo eco de su publicación y los usuarios denunciaron en las redes sociales del medio de prensa que hay lugares donde "los precios son todavía más caros".
El comentario que se repite una y otra vez, está cargado de ironía y es una contestación al régimen usando sus propias palabras: "Vamos por más".
A inicios de octubre una libra de tomates en Cuba costaba 600 pesos, pero ahora cuesta hasta 700 pesos. Los frijoles ya están en 600 pesos a lo largo y ancho del país. Los precios suben por día y no parece que esto vaya a tener fin.
Muchas familias han decidido dejar de comprar granos, carnes, pescados, huevos y productos derivados de la harina de trigo, porque no les alcanza el salario si consumen esos alimentos. Sus dietas son básicamente arroz y alguna verdura que encuentran a precio asequible. El desayuno es té de moringa.
Comer viandas tampoco es una opción en Cuba. El boniato, la yuca, el plátano y la papa, tienen precios que escapan del alcance de la mayoría de los trabajadores y son completamente inaccesibles para los jubilados.
El azúcar también está en tiempos de escasez. El régimen redujo la cuota que daban por la libreta de abastecimiento.
En la actualidad un cubano no se puede tomar ni siquiera el clásico "miroldo" o vaso de agua con azúcar que calmaba el hambre en el Período Especial. No hay nada en Cuba para comer por un precio económico. Nada.
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