La familia de Derek Rosa, el adolescente cubano acusado de asesinar a su propia madre frente a su hermana recién nacida en un apartamento de Hialeah, continúa apoyando al máximo al menor, para el que piden a las autoridades clemencia.
El más reciente movimiento de la familia ha sido enviar una veintena de cartas al juez para intentar revertir la decisión de la justicia de que el adolescente sea trasladado de cárcel para adultos donde está ahora -Metrowest- y sea retornado al centro de detención juvenil.
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"Su madre, desde el cielo, quisiera que se salve porque las madres siempre perdonan, y ella amaba a su hijo", dice un fragmento de la carta de la abuela materna, Isabel Acosta, según reveló Telemundo 51.
"Su mamá se desvivía y lo cuidaba con mucho amor. Todavía no cabe por mi cabeza lo que le ocurrió para hacerle eso a su madre", escribió por su parte el padrastro, uno de los que también envió una carta al juez.
"Me preocupa que en este centro pueda existir intimidación emocional, física o acoso. Por mucho que los oficiales penitenciarios lo intenten, hay situaciones en que los niños se mezclan con adultos y no hay muchos niños de su edad aquí", dijo la abogada del menor en declaraciones al citado medio de prensa.
La familia en pleno se ha mostrado en desacuerdo total con la presentación del caso que ha hecho la fiscalía, que ha acusado al menor de asesinato en primer grado.
"Mi nieto es el niño mejor del mundo", dijo en días recientes visiblemente afectada la abuela materna del menor en declaraciones a la prensa local a la salida de una rápida audiencia esta misma semana en la que la abogada del adolescente hizo pública la declaración de no culpabilidad de su representado.
"Esto no es Derek. Él es un nene bueno, cariñoso, amoroso... Nadie conoce a Derek como lo conocemos nosotros y esto no es Derek. No es adulto nada, es un niño que juega todavía", afirmó otra familiar ante la prensa congregada en el lugar.
La próxima audiencia del caso está programada para el próximo 9 de noviembre porque el juez Richard Hersch dijo que necesitaba tiempo para revisar el caso.
En la rápida audiencia, además de declarar "no culpable de asesinato en primer grado" a Derek Rosa, la letrada puso una moción para pedir que el joven sea trasladado hacia la cárcel juvenil, pues ahora está en una celda aislada en Metrowest Detention Center.
La declaración de "no culpabilidad" se dio luego de que en audiencia celebrada la pasada semana se determinara que Derek Rosa será juzgado como adulto y enfrentará un cargo por asesinato en primer grado.
En esa oportunidad el padre le explicó al juez que su hijo era un buen muchacho a quien le enseñó valores, que sus hermanos y el resto de su familia lo quieren y que nunca tuvo problemas de comportamiento. Pidió una segunda oportunidad para su hijo, del que dijo que quería ser ingeniero en la Armada.
A pesar de la petición de arresto domiciliario para el adolescente, el juez determinó que permaneciera en prisión y que le fuera negado el derecho a fianza.
En la noche del 12 de octubre el adolescente asesinó a su madre a puñaladas mientras la mujer dormía. Lo hizo frente a su hermanita, una bebé de 14 días de nacida y luego llamó a la línea del 911, donde dio detalles de lo ocurrido dentro del apartamento, ubicado en 211 del West y la 79 Place de Hialeah.
Luego del crimen, Derek Rosa tomó fotos del cadáver de su madre y las envió a un amigo, según reveló la policía. Luego le dijo al mismo amigo que la había matado.
Cuando las autoridades llegaron el menor salió con la manos en alto. El cuerpo de su madre, Irina García, de 39 años, yacía apuñalado junto a la cuna de la bebé, que ahora ha quedado bajo la custodia de la abuela materna.
"Es una cosa muy difícil de entender por qué suceden estas cosas. El niño no ha dicho por qué lo hizo, los investigadores no lo podemos creer, es muy triste para nuestra comunidad", dijo Eddie Rodríguez, vocero de la policía de Hialeah.
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