La solidaridad se manifestó una vez más en Cuba, gracias a un emotivo gesto de Yinet Fundora, al donar un par de espejuelos a una niña Liz Salet Sánchez González.
Liz, afectada por cataratas congénitas, se sometió a una operación en el hospital Juan Manuel Márquez en La Habana. Se encontraba en una situación de incertidumbre después de su cirugía, pues a la familia de la pequeña le informaron que necesitaría un segundo procedimiento quirúrgico y mientras debería usar espejuelos.
La falta de recursos y la escasez de lentes apropiados, la dejaron en una situación difícil porque se le recomendó el uso de espejuelos con una graduación que no resulta fácil de encontrar.
La activista cubana Diasniurka Salcedo Verdecia, lanzó un llamado en sus redes sociales para recaudar donaciones destinadas a la compra de espejuelos para Liz.
Explicó que el costo de estos lentes podía ascender hasta 150 MLC (moneda libremente convertible). El llamado de Salcedo conmovió a la comunidad y la respuesta fue abrumadora.
Yinet Fundora fue una de las personas que reaccionó a la publicación. Donó un par de espejuelos para la pequeña Liz, aliviando en gran medida la angustia de su familia.
La madre de Liz había expresado su desesperación ante la falta de recursos para adquirir los espejuelos necesarios y agradeció profundamente el gesto solidario de Fundora y la colaboración de la comunidad.
Diasniurka Salcedo Verdecia, también dejó muestras de agradecimiento a sus seguidores, destacó que la madre de Liz se encontraba en una situación económica precaria y enfatizó la importancia de apoyar a quienes más lo necesitan.
La activista resaltó que la familia de la niña había sido víctima de un fraude anteriormente, pagando 8,000 pesos por unos espejuelos que no se ajustaban a sus necesidades médicas.
Este emotivo acto de generosidad resalta la importancia de ser solidarios en estos tiempos de crisis en Cuba. El apoyo entre cubanos puede marcar la diferencia en la vida de quienes enfrentan desafíos de salud y económicos, porque el régimen se ha olvidado de sus ciudadanos y los empuja cada vez más a la pobreza extrema.
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