El estereotipo de Miami como ciudad donde los choferes manejan "a lo bestia" ya es bien conocido, sin embargo, las "animaladas" de algunos siguen causando sorpresa.
¿Por qué un residente de Miami decide un buen día conducir su automóvil por la autopista, con la puerta abierta y un pie calzado con chancleta rozando el pavimento? Un misterio. Como el que rodea a dos mujeres que deciden pasear en un descapotable Ferrari con toallas envolviendo sus cabezas.
Lo más leído hoy:
¿Qué motiva a otro a transportar seis colchones en el techo de su pequeño vehículo utilitario? ¿Cómo es posible que un tercero maneje imperturbable mientras se afeita la barba con una maquinilla eléctrica?
Imágenes como estas, y otras igual de irracionales, fueron compartidas por el sitio de sucesos Only in Dade, donde se acumulan las evidencias de que entre los choferes de Miami hay algunos que son especímenes singulares a los que hay que dar de comer aparte.
Subirse a un vehículo en Miami y recorrer sus calles y autopistas puede resultar una experiencia alucinante, en la que se desvanece la realidad y en su lugar aparecen los más inverosímiles objetos y extravagantes situaciones, como mostró el mencionado sitio en una publicación reciente.
Puedes ver un trasero de mujer asomando por una ventanilla mientras se menea haciendo twerking. Puedes ver a conductores chocar con otros vehículos como si estuvieran ciegos, protagonizando absurdos accidentes. O puedes ver a una malabarista en acción mientras circula en un monociclo.
Archivado en:
