Decenas de personas despiden el martes al joven cubano Guillermo Alexnay Céspedes Chacón, de 25 años, quien fue asesinado en la madrugada del lunes en Santiago de Cuba.
El periodista independiente Yosmany Mayeta posteó en Facebook imágenes del entierro, y afirmó que la despedida tuvo una amplia presencia policial y de boinas negras.
Las imágenes dejan ver a más de 300 personas frente al cementerio. La familia se habría opuesto a la presencia de la policía en el lugar y exige justicia para Céspedes Chacón.
El joven fue apuñalado mortalmente en una fiesta en un centro llamado “El Ciroa”, en la provincia de Santiago de Cuba.
El joven, quien según el citado comunicador era conocido en redes sociales como "Breezy Alexnay", residía en la cuartería Julio Palacios, del barrio santiaguero José Martí, y era padre de dos niños menores de un año.
El supuesto asesino ha sido identificado como Marcos Rene Vera, residente en la barriada Los Pinos, y se encuentra prófugo desde el suceso.
La víctima recibió una puñalada en el estómago y fue trasladado al hospital Saturnino Lora, donde lo declararon fallecido.
Las autoridades cubanas han admitido la creciente criminalidad en Santiago de Cuba, donde varios jóvenes han sido asesinados en las últimas semanas.
La pasada semana un joven cubano identificado como Wilmer Yunior Lestapier fue apuñalado cuando salía de una fiesta universitaria que se realiza cada semana en la pista Pacho Alonso de Santiago de Cuba, según denunció su madre, Yanelis Pascual, en declaraciones al citado periodista.
La mujer precisó que durante el ataque el pasado 7 de febrero, le cayeron arriba cinco muchachos y que le dieron cuatro puñaladas, de las cuales dos le afectaron el riñón y una el hígado.
Anisleidis Bueno, una madre cubana actualmente encarcelada, también publicó un conmovedor testimonio luego de que su hijo de 16 años, Drayan Enrique Cuevas Bueno, fuera asesinado a puñaladas en una fiesta callejera en Santiago de Cuba en diciembre pasado.
Ella transmitió su terrible experiencia a otras madres, y les aconsejó cuidar a sus hijos aunque tengan 15 ó 20 años, que hablen mucho con ellos y que los lleven al psicólogo si hace falta.
A finales de enero un alto cargo del Ministerio del Interior en esa provincia reconoció, durante una reunión con vecinos del reparto Abel Santamaría (El Salao), la presencia de bandas criminales dedicadas a "implementar el terror" entre los pobladores.
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