Miami es una metrópolis estadounidense que palpita al ritmo de la expansión y el cambio, pero vivió su transformación más notable a partir de la década de 1960.
En un video publicado por el perfil de Instagram Miami History, puedes ver cómo era la ciudad en la época de The Beatles, marcada en el sur de Florida por la llegada masiva de cubanos que escapaban del régimen de Fidel Castro, buscando refugio y nuevas oportunidades.
Miami pronto se convertiría en símbolo de esperanza y libertad. A medida que los exiliados cubanos se asentaban, se comenzó a sentir su influencia no solo en la demografía sino también en su arquitectura, economía y cultura.
Los recién llegados, aportando su energía y empuje, transformaron barrios y negocios, dando origen a áreas como la Pequeña Habana, que se convirtió en el corazón de la comunidad cubana en el exilio.
Los migrantes llegaban de diversas clases sociales. Trajeron consigo un espíritu inquebrantable. En poco tiempo, establecieron negocios, contribuyeron al panorama culinario de la ciudad y enriquecieron el tejido cultural con su música, arte y tradiciones.
Esta oleada migratoria no solo redefinió a Miami sino que también fortaleció sus lazos con el resto de territorios de Estados Unidos, convirtiéndola en la puerta de entrada a América.
La huella de los cubanos es evidente incluso en el panorama mediático de la ciudad, con periódicos, estaciones de radio y canales de televisión en español que atienden a una audiencia diversa y multilingüe.
Desde empresarios hasta artistas, la comunidad cubanoamericana ha tenido un papel crucial en hacer de Miami un centro internacional de negocios y un crisol de culturas vibrantes.
Mirar hacia atrás a la Miami de la década de 1960 es recordar el inicio de una era definitoria, donde la influencia cubana comenzó a tejerse en la narrativa de una ciudad con visión de futuro.
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