Autoridades de Hialeah abordaron en un reciente foro el tema de la llegada masiva de miles de migrantes a la ciudad, principalmente cubanos, con vistas a evaluar el impacto que esto ha tenido, así como los recursos disponibles o a pedir al gobierno federal para afrontar la masiva llegada de personas.
Se estima que solo en los dos últimos años han llegado unos 80,000 cubanos, aunque no hay cifras oficiales.
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“Nosotros podemos, no solamente ayudar a esas personas a adaptarse sino también comunicarle al gobierno federal la ayuda que hace falta para una ciudad como la nuestra. La participación de los políticos que nos representan en Washington y otras agencias que trabajan en este espacio”, dijo el alcalde de Hialeah, Esteban Bovo, en declaraciones recogidas por America Tevé.
“Se trata de ver cómo nosotros como ciudad podemos adaptarnos y dar mejor servicios”, añadió.
Se estima que de los 420,000 migrantes que llegaron de Cuba a Estados Unidos en los dos últimos años, el 75% acabó en el sur de la Florida y gran parte de ellos se establecieron en Hialeah.
George Fuente, jefe de la policía de la ciudad, admitió el incremento de accidentes tránsito en los dos últimos años, así como de arrestos y de criminalidad en general.
No obstante, aclaró que la policía no está para ver si una persona está documentada o indocumentada, pero sí para frenar la criminalidad.
Las autoridades explicaron que la inmigración masiva no solo ha generado una crisis inmobiliaria en la ciudad, con rentas más altas y mayor número de casas móviles, sino que además ha impactado en el sistema educativo por la llegada masiva de niños en edad de escolarización.
“Se ha visto un crecimiento de vivienda alternativas que no se pueden aceptar en la ciudad, me estoy refiriendo obviamente a las casas móviles”, subrayó el alcalde, que en los últimos meses ha tomado medidas para frenar la oleada de casas móviles ilegales en Hialeah.
También se han disparado las tareas diarias de los funcionarios públicos.
La idea de estos foros es conocer el número real de inmigrantes en la ciudad de Hialeah y valorar así los recursos disponibles o a pedir para afrontar los gastos derivados de esta ola de inmigrantes.
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