El presidente ruso, Vladímir Putin, condenó este sábado el atentado terrorista en la sala de conciertos Crocus City Hall en las afueras de Moscú, y señaló a Ucrania como "cómplice" del ataque.
El hecho, donde han muerto desde el viernes más de 150 personas, fue reivindicado por el Estado Islámico.
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Putin dijo que "todos los autores, organizadores y los que encargaron este crimen recibirán un merecido e inevitable castigo, sean quienes sean e independientemente de que los hayan enviado", y agregó que cuatro terroristas detenidos hasta el momento intentaron huir a través de la frontera ucraniana, citó el diario Público.
"A los terroristas, asesinos y bestias, que no tienen ni pueden tener nacionalidad, les espera un funesto destino: venganza y olvido. No tienen futuro", sentenció el mandatario en una alocución televisiva. Después calificó de falsa la reivindicación del Estado Islámico sobre el hecho.
En ese sentido, se comprometió a "Identificar y castigar a cada uno que está detrás del atentado", y afirmó que personas pacíficas e inocentes fueron víctimas del atentado terrorista en el teatro Crocus.
"No puedo dejar sin atención la ayuda de los ciudadanos de a pie que no permanecieron indiferentes; tenemos que ayudar a todas las familias cuyas vidas se han visto afectadas por una terrible catástrofe, a los heridos y lesionados", subrayó.
Putin recordó los atentados perpetrados hace años por la guerrilla islamista del Cáucaso, y dijo que "esperamos la cooperación con todos los países que comparten sinceramente nuestro dolor y están dispuestos en la práctica a aunar esfuerzos en la lucha contra el enemigo común, el terrorismo internacional en todas sus manifestaciones".
Las autoridades refuerzan desde el viernes las medidas antiterroristas en la capital del país y la adyacente región de Moscú, donde tuvo lugar el siniestro en una sala de conciertos ubicada dentro de un centro comercial.
Todavía los rescatistas y personal especializado labora levantando escombros de la instalación, que fue incendiada por los terroristas luego de que dispararan contra al menos 40 personas. A medida que avanzan los trabajos las autoridades han anunciado que la cifra de muertos continúa elevándose y actualmente ronda los 150.
Putin anunció que este domingo será día de luto nacional por el mayor atentado terrorista sufrido por Rusia desde la matanza de Beslán, de 2004, donde fallecieron más de 300 personas.
El gobernador de la región de Moscú, Andréi Vorobiov, visitó el lugar de la tragedia y advirtió que el número de víctimas mortales "aumentará considerablemente" conforme avanzan las labores de búsqueda y rescate.
Según los investigadores rusos, la causa de la muerte de los asistentes al concierto, en el que se produjo la tragedia, son heridas de bala y la asfixia por el humo del incendio provocado por los atacantes.
El Servicio de Seguridad Federal de Rusia (FSB) dijo este sábado que ha detenido a 11 personas presuntamente vinculadas al atentado, entre ellas cuatro supuestos responsables directos del ataque. El gobierno ruso ha calificado de falsa la reivindicación del atentado hecha por el Estado Islámico.
La víspera, Kiev aseguró que "no tiene nada que ver" con el hecho: "Desde luego, Ucrania no tiene nada que ver con el tiroteo o la explosiones en Crocus City Hall. No tiene ningún sentido", señaló el asesor de la Oficina de la Presidencia ucraniana Mijailo Podoliak en un mensaje en la red social X, citó el diario El Mundo.
Sin embargo, el presidenteVladimir Zelenski adelantó que Rusia usaría el atentado para "aumentar la propaganda militar", y "justificar ataques genocidas contra la población civil de Ucrania".
El asesor del mandatario ucraniano también afirmó que mucho antes del tiroteo de este viernes en la capital rusa, "habíamos oído advertencias públicas de las embajadas extranjeras en Moscú sobre la posibilidad de tales excesos sangrientos".
El pasado 7 de marzo la Embajada de Estados Unidos en Moscú advirtió de un riesgo "inminente" de ataque terrorista contra grandes concentraciones en la capital rusa, y recomendó a los ciudadanos estadounidenses que evitaran las aglomeraciones.
"Estamos monitorizando informes de que extremistas tienen planes inminentes de atacar grandes concentraciones de gente en Moscú, incluyendo conciertos, y se debe aconsejar a los ciudadanos estadounidenses que se abstengan de acudir a estos lugares durante las próximas 48 horas", señaló la embajada en una alerta de seguridad publicada en su página web.
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