Una cámara de videovigilancia captó el momento en que una cafetera explotó en el interior de una vivienda de una familia cubana en Miami.
El cubano, que se encontraba preparando su bebida en una cafetera clásica italiana, resultó lesionado al explotar el artefacto.
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A juzgar por las imágenes, compartidas en el sitio de sucesos Imfaomiami, la explosión hizo que la cafetera saliera volando por los aires, impactando en la cabeza del cubano.
El suceso provocó un gran sobresalto en el hombre y en otra cubana que vino corriendo en su auxilio, presa de una gran agitación.
Al parecer, la mujer consideró que la herida y las quemaduras sufridas por el hombre requerían atención médica especializada.
“¡Vamos para el médico!”, se le escuchó decir a la nerviosa mujer. Sin embargo, se desconoce si finalmente acudieron al hospital o todo quedó en un susto.
Por su parte, al otro lado del "charco" un cubano mostró a comienzos de marzo cómo se las arreglaba en medio de un apagón para preparar café con una vela por falta de electricidad para alimentar su cocina.
"Esto pasa cuando te ataca el vicio de café y no tienes luz, ni agua, ni gas. La caliente pa' arriba de mí y yo pa' arriba de la caliente... esto es café con vela...", afirmó el usuario de redes sociales.
A pesar de tener que preparar su brebaje en semejantes condiciones, el cafetero de la Isla cuenta con una "ventaja" sobre su paisano en Miami, y es que en Cuba las torrefactoras hacen pruebas al café para evitar que exploten las cafeteras.
"Nosotros en el laboratorio tenemos cafeteras criollas. A cada lote de café se le hace varias pruebas de explosión", aseguraba el director de la Torrefactora de Sancti Spíritus, Ricardo Pérez Pérez, a finales de octubre pasado.
Entrevistado por Escambray, el directivo explicó que el café que envasaban cumplía con todas las exigencias de calidades requeridas, incluidas “las pruebas de explosión en cafeteras criollas”, algo que asombró a muchos lectores y causó no pocas bromas entre los cubanos.
“Aunque nuestra tecnología es obsoleta, somos capaces de garantizar las elaboraciones requeridas, pero la calidad es algo que seguimos de cerca. Se hacen varios muestreos durante el proceso, que incluyen las pruebas de explosión en cafeteras criollas, que son las más usadas por los consumidores”, aseguró el directivo.
Sin embargo, en septiembre de 2020 trascendía el caso de una cubana que denunció en redes sociales la mala atención médica recibida por su tía, quien había sufrido quemaduras graves luego de la explosión de una cafetera.
“Esto es a lo que se le llama potencia médica. Aquí, en Cuba, mi tía se quemó y fue al policlínico de Boyeros a que la atendieran y caminando porque no hay transporte y, como mismo fue, tuvo que virar, porque no había médico que la pudiera atender”, lamentó la mujer en Facebook.
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