La Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) eligió un singular eslogan para su campaña del XII Congreso, en un contexto de escasez, y aumento de la pobreza en Cuba: "Crea tu felicidad".
El filosófico eslogan pretende invitar a los jóvenes cubanos a inventarse un mundo ideal, en un país que se desmorona, para que encuentren la felicidad por sí mismos. El Estado confía en que serán ellos quienes saquen a Cuba de la miseria en que se encuentra, por la gestión del propio régimen.
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El spot publicitario de esta campaña va cargado de color, incluye rostros de jóvenes de distintos géneros, edades y ámbitos profesionales. Sin embargo, no logra transmitir optimismo.
La mayoría de los rostros lucen serios, rígidos, con sonrisas tenues o fingidas. Las voces que se escuchan repiten el eslogan lentamente, sin gracia, en un tono que no convence ni a los cubanos más comunistas.
"Crea tu felicidad" hace referencia indirecta a otra consigna que fue muy famosa en Cuba y generó burlas durante largos años: "Somos felices aquí".
En la crítica situación económica, política y social que tiene Cuba, estos eslóganes comunistas no calan en la población y terminan convirtiéndose en motivos de risas, o haciendo juego al doble sentido en situaciones cotidianas que está lejos de la pretendida "felicidad" que quiere transmitir el gobierno.
El XII Congreso de la UJC está celebrándose en La Habana desde el 2 de abril y concluye este jueves en el Palacio de la Convenciones.
Miguel Díaz-Canel ha dicho que "Crea tu felicidad" es una "atractiva e inusual etiqueta". Recordó que este 4 de abril, la UJC celebra sus 62 años. Fue fundada por Fidel Castro, al igual que la Organización de Pioneros José Martí (OPJM) que cumple, ese mismo día, 63 años.
La UJC aprobó en este Congreso, modificaciones de sus estatutos para "dinamizar la vida de la organización, consolidarla como vanguardia real, acrecentar su alcance e influencia y perfeccionar la labor político-ideológica", según indicó Trabajadores.
Desde 2021 Cuba enfrenta una de las mayores crisis migratorias de su historia. Los que más abandonan la isla son los jóvenes, para escapar de la miseria, de la represión del Estado, la falta de libertades e ir en busca de una vida mejor, donde puedan cumplir sus anhelos.
Miles de jóvenes cubanos han preferido cruzar el mar en botes precarios, atravesar la Selva del Darién, sufrir el frío de Siberia y hasta deshidratarse en un desierto, antes que permanecer en Cuba pensando cómo "crear su felicidad". Tienen la certeza de que mientras haya comunismo, no hay nada con lo que soñar en su tierra natal.
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