La empresa Richmeat de Cuba S.A., dedicada a la elaboración y distribución de productos cárnicos como el picadillo, volvió a obtener la distinción de “Vanguardia Nacional” por tercer año consecutivo.
A pesar de la grave crisis en el sector de la industria alimentaria del país y el riesgo de "inseguridad alimentaria" que se extiende entre amplias capas de población, las autoridades sindicales del régimen cubano consideraron que la planta procesadora de cárnicos merecía la condición de Colectivo Vanguardia Nacional por “la eficiencia y la calidad de su producción”.
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Con la presencia de Jorge Luis Fajardo Casas, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Alimentaria y la Pesca, cien trabajadores de Richmeat de Cuba asistieron al acto celebrado en la Zona Especial de Desarrollo (ZED) Mariel para recibir la distinción. El nuevo ministro de la Industria Alimentaria, Alberto López Díaz, no asistió al acto.
La empresa fue la primera en establecerse en la ZED Mariel como resultado de un proyecto de inversión extranjera (México). En 2015 obtuvo la aprobación de las autoridades cubanas y se inauguró el 24 de enero de 2020, con la presencia de funcionarios del gobierno cubano, empresarios, medios de comunicación, representación de la secretaría de relaciones exteriores y personal de la embajada de México.
En marzo de 2023, Richmeat de Cuba S.A. producía un volumen de unas 3,000 toneladas métricas de picadillo mensuales. Actualmente, de la planta de procesamiento de cárnicos salen más de 2,000 toneladas métricas de picadillo mensuales.
Así lo explicó ante las cámaras del Noticiero de la Televisión Cubana (NTV) la secretaria general de la sección sindical de la empresa, Yipsian Román Rodríguez, afirmando que constituía un orgullo “tener hoy [este picadillo] en las mesas de todos los cubanos”.
La afirmación no deja de resultar llamativa en medio de una situación de escasez generalizada de alimentos, en la que el picadillo de carnes constituye uno de los productos menos consumido por los cubanos, ya sea por su rara aparición en los puntos de venta como por sus elevados precios en las tiendas en moneda libremente convertible (MLC).
En diciembre de 2022, el régimen cubano implementó un sistema para la venta en moneda nacional de productos liberados de alta demanda que se comercializaban en las cadenas de tiendas CIMEX y Caribe, ante el fracaso de la modalidad de control estatal conocida como “brigadas anticoleros”, encargadas de organizar las colas en estos establecimientos y evitar el acaparamiento y otras irregularidades.
Para ello definieron cinco renglones controlados (pollo, picadillo, salchicha, aceite y detergente), cuya venta se realizaría en un determinado periodo, en la tienda asignada según la zona de residencia del cliente, y se apuntaría la compra en la libreta de abastecimiento.
Esta modalidad de venta comenzó en cinco municipios: Centro Habana, La Habana Vieja, Regla, Cotorro y Arroyo Naranjo, con la intención de extenderla al resto del país. A fecha de hoy, se desconoce si los residentes de todos los municipios de Cuba tienen posibilidad de acceder a esta modalidad de distribución de alimentos y productos de primera necesidad.
La tercera distinción de Vanguardia Nacional a Richmeat de Cuba S.A. se produce en un momento en el que la actualidad noticiosa de Cuba se vio sacudida por la revelación de un caso repugnante y escandaloso de maltrato animal, y venta de carne no apta para consumo humano.
El pasado jueves trascendió que tres hombres habían sido detenidos en San José de las Lajas, en la provincia de Mayabeque, por presuntamente matar perros de ese municipio y venderlos luego como carne de cerdo o de carnero, y como picadillo, según denunció en Facebook Yenny Caballero Peña, defensora de los derechos de los animales.
Días antes, las autoridades cubanas habían desmentido una información que circulaba en internet sobre la supuesta producción ilegal de picadillo a partir de carne de perros y gatos. Según el Gobierno de La Habana, la noticia “solo intentaba fomentar el pánico y desacreditar a las autoridades”.
Ante la evidencia proporcionada por Caballero Peña, el Ministerio de Agricultura emitió una nota informativa repudiando las “matanzas de perros en ese territorio”, calificándolas como “atentando contra todas las normas de Sanidad y Bienestar Animal, que violan los principios éticos y morales de nuestra sociedad”.
Son muchos los cubanos que, por sus bajos salarios, se ven privados de la posibilidad de comprar productos cárnicos. El picadillo mixto condimentado de Richmeat se comercializa a un precio que oscila entre los 2.60 y los 3.00 dólares el envase de 400 gramos. Con el dólar cotizándose a 350 CUP en el mercado informal de divisas, el salario mínimo de los trabajadores cubanos (2,100 CUP) queda reducido a unos 6.00 dólares al mes, en un momento en que un cartón de 30 huevos llega a costar 3,500 CUP, o sea, unos 10.00 dólares.
De manera subrepticia, el régimen cubano ha ido implementando su política de “eliminar subsidios excesivos y gratuidades indebidas”, desentendiéndose del “contrato social” que representaba la libreta de abastecimiento y la venta de productos cárnicos racionados a precios subsidiados.
Sin embargo, la representante sindical de Richmeat de Cuba no se sonrojó al manifestar con “orgullo” que el picadillo mixto condimentado es un producto presente “hoy en las mesas de todos los cubanos”. Yipsian Román Rodríguez no parece de esos "cuadros" que se sobresaltan si encuentran una rana en su paquete de picadillo.
La empresa que inaugurara en su día el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel junto a su esposa, Lis Cuesta Peraza, forma parte del tejido empresarial que trama la “continuidad” en la Isla, basado en la promoción de una “economía de mercado” controlada por un Estado totalitario que impone su habitual retórica propagandista, y pregona la necesidad de “potenciar la empresa socialista” mientras privatiza los activos económicos del país de manera opaca, asesorado por expertos rusos en la creación de oligarquías sumisas a un poder mafioso.
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