La tragedia se vuelve a cebar en una familia de Hialeah, que en menos de dos años ha sufrido la pérdida de dos de sus miembros: primero una joven madre y ahora su esposo, ambos fallecidos en accidentes de tránsito.
El miércoles pasado, Antonio José Estrada, de 38 años, estaba visitando a su familia cuando salió a dar una vuelta en su motocicleta todoterreno. En la 53 terrace y la avenida 5 del oeste fue a girar a la izquierda, perdió el control del ATV y se estrelló contra una casa. Fue transportado en helicóptero al Hospital Jackson Memorial, pero no sobrevivió a sus heridas.
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La muerte de Estrada deja huérfano a su hijo Jacob, cuya madre falleció trágicamente en otro accidente ocurrido en 2022. El pequeño perdió ahora a su papá, justo el día antes de cumplir nueve años.
Jacob estaba con su mamá el día que ella murió. El pequeño consiguió sobrevivir a pesar de sufrir una lesión cerebral, múltiples fracturas, daños en el hígado, el corazón y los riñones.
Su madre no lo logró. Se llamaba Cristina Hernández, de 30 años, era enfermera y tenía cinco semanas de gestación.
El accidente en que perdió la vida ocurrió el 19 de diciembre de 2022 en Miramar, cerca de la intersección de Flamingo Road y Somerset Boulevard, luego de que la mujer recogiera a su hijo de la escuela.
Fueron impactados por un joven de 16 años que conducía el Lexus de su padre sin licencia e iba a más de 110 millas por hora y bajo la influencia de la marihuana.
El adolescente, identificado como Cristhian Bravo, estudiante de Everglades Senior High School, está en prisión y siendo juzgado como adulto, acusado de homicidio vehicular y homicidio involuntario.
La Policía también acusa a su padre, José Bravo De La Torre, por permitir que el chico manejara su auto sin licencia.
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